El 8% de los peregrinos que se desplazaron hasta Santiago a través del Camiño Portugués durante el año 2017 pernoctaron en el albergue de Valga.
Esta posada, que forma parte da red pública de Galicia, cuenta con tres dormitorios y 78 plazas, cocina, comedor, duchas, almacén de bicicletas, botiquín, calefacción, sala de reuniones, lavandería, secadora y tendedero, así como un jardín con terraza. El precio es de seis euros por noche y el horario de admisión, de 13.00 a 22.00.
Desde que este establecimiento abrió sus puertas, en abril de 2011, el número de peregrinos alojados fue en aumento progresivamente y de manera continuada.
En los seis últimos años, las estancias se incrementaron en más de un 262%. En 2012, primer ejercicio completo, fueron 1.744. En 2013 ascendieron a 2.329, en 2014 fueron 2.552, en 2015 se contabilizaron 3.164 y en 2016,3.512.
La mayor parte de los peregrinos que utilizaron el albergue de Valga eran de nacionalidad portuguesa. Alemana e italiana son las dos que figuran a continuación.
Los meses de mayor actividad son los comprendidos entre junio y septiembre, ambos incluidos.
Durante los seis años que permaneció abierto, en enero el albergue fue usado por una media de 100 peregrinos y en febrero pernoctaron 140. En marzo mejora la cifra (595), lo hace notablemente en abril (1.221) y la tendencia se mantiene al alza en el mes de mayo, con 1.430.
El verano es la mejor época, como lo corroboran los 1.353 peregrinos de junio, los 1.280 de julio, los 1.896 registrados en agosto o 1.780 en septiembre. En octubre también hay una notable actividad (1.120), que cae en noviembre (200 ) y diciembre con 142.
