El BNG cuestiona la salubridad del agua procedente del río Umia

Los nacionalistas piden a la Xunta que informe sobre la situación
 

Los nacionalistas expusieron sus demandas en el malecón de Caldas. F.S.
photo_camera Los nacionalistas expusieron sus demandas en el malecón de Caldas. F.S.

La presencia de la microcistina en el agua del Umia es una constante desde que fue construido el Encoro de A Baxe, y desde entonces el Concello de Caldas de Reis realiza unos controles especiales para determinar que su presencia no alcanza los límites en los que dejaría de ser potable. Pero este método, que se aplica mediante el uso de carbono y de ozono, no se utiliza en el resto de los municipios que se abastecen del mismo río, advirtió este viernes la diputada del BNG Montserrat Prado en una rueda de prensa celebrada en Caldas de Reis.

Es lo que sucede en Portas, Meis, Ribadumia, Vilagarcía, Vilanova y O Grove, cuya población supera los 100.000 habitantes y se duplica durante los meses de verano, recordó la nacionalista, antes de indicar que su formación no pretende generar una situación de alarma. No obstante, agregó que para despejar cualquier duda, la Xunta debería intensificar los controles del agua que realiza y hacer públicos los resultados.

Acompañada por representantes del BNG de Caldas de Reis, Cambados, Portas, Moraña, Vilagarcía y Meis, Prado también requirió a la Administración autonómica que asuma su responsabilidad y realice una campaña informativa con la finalidad de evitar que el Umia se use para el baño desde la localidad termal hasta su desembocadura, porque el contacto de la piel con el agua puede provocar irritaciones, indica el escrito enviado el día 28 por Sanidade al Concello de Caldas en el que le emplaza a prohibirlo.
 

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