El matrimonio formado por Olga Andón Lorenzo y Francisco Fernández Montouto, vecinos de la localidad silledense de A Bandeira, celebrará este domingo sus bodas de oro con una misa en la iglesia de Manduas, a la que seguirá una comida familiar. Se casaron el 18 de febrero de 1968 y 50 años después aseguran que el secreto de su éxito como pareja está "en saber perder", dice él, "e en perdoar, porque se te deixas levar polo xenio...", apostilla ella.
Dos años de noviazgo, con carteo de por medio, dado que Francisco estaba emigrado en Venezuela, les bastaron para saber que querían continuar su vida juntos. Lo hicieron durante seis años en el país americano, donde nació su único hijo. Luego, regresaron juntos para continuar con el conocido negocio de los padres de ella, dedicado a la venta de carne de cerdo, y abrieron un ultramarinos. "Traballamos coma cosacos", asegura con lágrimas en los ojos.
Ahora, con 69 años ella y 80 él, continúan proclamando su amor. "Seguímonos querendo, se acaso, máis ca nunca", defiende con rotundidad Olga.
