Al menos dos de los brotes activos en el área sanitaria están localizados en Cuntis, cuyo alcalde, Manuel Campos, no esconde su preocupación. "A situación é moi grave. Temos unha incidencia moi alta, por enriba de 400 casos por cada 100.000 habitantes e é probable que siga subindo, xa que estamos pendentes de resultados de varias probas", indicó a este periódico.
El regidor explica que hasta ahora los indicadores apuntaban hacia una relativa normalidad, pero que la valoración ha cambiado cuando ha puesto sobre la mesa todos los positivos que residen en el municipio y que no estaban computando por tener su médico de cabecera en otros concellos. Entonces la cuenta resultante arroja "máis de 20" contagios que, en su opinión, merecen levantar escudos. De hecho, emplaza a la Administración sanitaria a realizar más pruebas para conocer el alcance real de la pandemia, pues ha visto que los particulares que llaman al teléfono de información de la covid no les ofrecen la PCR "se non teñen síntomas". Además, insta a sus convecinos a suspender las reuniones, pues insiste en que "a situación é extremadamente grave".
Por su parte el Concello ha suspendido la programación de ocio y cultura a raíz de los últimos positivos. Entre ellos se encuentran los de una trabajadora de un supermercado de la localidad, que este miércoles cerró sus puertas como medida preventiva, y los de varios alumnos del CPI Don Aurelio Marcelino Rey García, donde han sido cerradas tres aulas (las dos últimas de 3º de la ESO). Hay cerca de cien vecinos confinados.
CALDAS DE REIS. El brote de Cuntis se ha ramificado a concellos lejanos y otros limítrofes, como el de Caldas, donde al menos uno de los positivos localizados en el instituto Aquis Celenis es del de un joven residentes en el municipio cuntiense.
NO obstante, lo que más asombra al alcalde caldense no es esta ramificación del virus, sino que tras seis meses de pandemia los concellos siguen sin recibir información sobre la evolución de la covid-19 en cada término municipal. Su crispación crece cuando se trata de brotes importantes, como el declarado el pasado día 12 y que afecta a una docena de personas residentes en su concello. "Estoy alucinando, porque en vez de ser el alcalde, parezco el tonto del pueblo. Ningún organismo me aporta ningún dato y la Fegamp (a la que la Xunta preveía facilitar cifras de positivos) lo que me traslada es que la única información disponible son esos mapas de colores que publica el Sergas (en los que se establecen distintos niveles de alerta en función de los diagnósticos recientes). En los centros de salud no constan ningún brote (...) Esto no puede seguir así", reivindica Rey.
La falta de información llevó al regidor a pasar revista a los puntos neurálgicos del concello, concluyendo que "todos los indicios apuntan hacia la normalidad".
