David Cameron y Kylie Minogue son adictos al 'Angry Birds'

Se conformaban con que resultara divertido, pero Angry Birds acabó siendo la perdición de millones de personas en todo el mundo. El finés Julien Fourgeaud, uno de los creadores del popular juego para móviles, ha visitado este miércoles la Campus Party para compartir las claves del éxito de esta propuesta.

Desde que llegara al mercado a 2009, Angry Birds ha registrado más de 250 millones de descargas, cuenta con una legión de seguidores entre los que destacan famosos como David Cameron o Kylie Minogue y se ha mudado de su entorno inicial, los iPhone, a todas las plataformas imaginables, incluidas videoconsolas y una película que ya está en marcha.

En definitiva, este sencillo juego en el que unos enfadados pájaros tratan de vengarse del ejército de cerdos verdes que han robado sus huevos ha revolucionado el modelo de negocio de las aplicaciones para móviles.

Fourgeaud, que además de ser uno de los fundadores de la desarrolladora del juego, Rovio Mobile, es responsable del área de negocio, otorga todos los méritos a la creatividad.

"Sin una buena idea no se puede hacer negocio, no hay manera de vender nada", ha explicado en una entrevista en la que ha avanzado que con la llegada del juego a otras plataformas como el navegador de Google Chrome o la red social Facebook, lo que buscan es "que se pueda disfrutar de Angry Birds en todas partes, en casa, en la oficina o de vacaciones".

Para Fourgeaud, el éxito de este modelo de negocio, que apostó por iPhone como la primera plataforma del juego, no tiene por qué repetirse para otras propuestas porque "el mejor lugar para lanzar un juego no siempre es el mismo y depende de las características que tenga".

"Vivimos un momento de transición en el que las empresas de juegos se van a convertir en empresas de entretenimiento. La gente empezó a diseñar sus camisetas de Angry Birds y nosotros decidimos lanzar una línea oficial para asegurar la calidad del producto", ha comentado Fourgeaud sobre el "merchandising", del que ha destacado además su utilidad para que otras personas conozcan el juego.

Su trabajo es vender y por eso Fourgeaud no duda en tararear la pegadiza canción del juego a petición de los periodistas. "Solía tenerla de tono en el móvil, pero mis amigos me pidieron que la quitara porque cada vez que la oían se pasaban todo el día cantándola", ha bromeado.

La idea de los creadores del juego no fue nunca hacer algo tan adictivo como al final resultó ser Angry Birds, sino que el único objetivo fue siempre, subraya, "tratar de hacer las cosas lo mejor posible". Lo demás vino después.

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