Dos agentes de la Policía Local de Poio fueron ingresados en la tarde/noche del lunes en el
Hospital Montecelo para tratarse de las heridas y contusiones de diversa consideración que sufrieron
al ser atacados por un grupo de vecinos de O Vao, cuando acudían a una llamada de refuerzo efectuada por la Guardia Civil.
El suceso ocurrió sobre las 19.30 horas, cuando una patrulla de la Benemérita acudió a O Vao de Arriba para identificar a un joven y notificarle la propuesta de sanción por sus reiterados incumplimientos de la orden de confinamiento por el estado de alarma.
Durante la intervención, el ambiente se volvió cada vez más tenso y el muchacho acabó agrediendo a uno de los guardias, por lo que fue esposado y detenido. Esto encendió aún más los ánimos de los familiares y amigos que seguían la escena, que comenzaron a lanzar una lluvia de piedras contra el vehículo oficial, fracturando la luna delantera.
Cuando la patrulla ya se encontraba de vuelta en la Comandancia, sobre las 20 horas llegó al poblado chabolista una dotación de la Policía Local de Poio, que había acudido como respuesta a la llamada que antes habían efectuado al 112 los guardias civiles al verse atacados.
Según la versión de la Concellería de Seguridade Cidadá de Poio, nada más apearse del vehículo, los funcionarios se vieron sorprendidos por una lluvia aún más intensa de piedras, palos y objetos contundentes, sin saber exactamente a qué era debida esa reacción tan hostil. Tan solo les dio tiempo a protegerse fuera del alcance de sus agresores, al tiempo que solicitaban refuerzos.
Mientras tanto, su coche era objeto de la ira de los furibundos vecinos (algunos armados con hachas, como se observa en varios vídeos que circularon por las redes minutos después), que no cesaron de apedrearlo hasta ocasionarle importantes desperfectos.
La llamada de socorro fue atendida por varios compañeros de la Policía Local de Poio, así como por numerosos efectivos de la Guardia Civil y de la Policía Nacional. Una vez controlada la situación, los dos policías heridos fueron trasladados a un centro sanitario para ser atendidos de las magulladuras, contusiones y cortes que presentaban. Un conductor que presenció la escena aseguró que «de la cabeza de uno de ellos manaba abundante sangre».
Tanto el alcalde, Luciano Sobral, como la concelleira de Seguridade Cidadá, Marga Caldas, y el jefe de la Policía Local, Antonio Duarte, se desplazaron hasta el Hospital Montecelo para interesarse por su estado.
Por el momento no se han practicado más detenciones que la del joven que sistemáticamente incumplió la orden de confinamiento y atacó a los guardias civiles. La virulencia con la que respondieron los vecinos de O Vao a la presencia policial aconsejó no proseguir con las identificaciones ni efectuar una nueva intervención en el poblado.
Sin embargo, las fuentes policiales consultadas explicaron que las diligencias continúan en los despachos y durante el día de hoy es posible que lleguen al Juzgado de Guardia, que determinará la identificación de todos los participantes en la reyerta y su posterior puesta a disposición judicial.
Cabe recordar que desde hace varias semanas, la Policía Local de Poio ha establecido un operativo de vigilancia y control del narcotráfico en el entorno de O Vao.
