Además de la aprobación del Presupuesto de 2019, el Pleno extraordinario del pasado jueves trató otro tema que, en principio, no figuraba en el orden del día. El debate sirvió para que el Gobierno municipal anunciase su intención de aliviar la situación de aquellas comisiones responsables de la gestión de cementerios que se ven obligadas a pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Tal y como explicaron el alcalde, Luciano Sobral, y el concelleiro de Facenda, Xulio Barreiro, esta tasa solo se le aplica a los camposantos que son responsabilidad exclusiva de agrupaciones vecinales, mientras que están eximidos los parroquiales (cuya propiedad es de la Iglesia) y los municipales. En el caso de Poio, quienes tienen que hacer frente a estos costes son los responsables de los cementerios de Combarro y San Salvador. Barreiro señaló que el gasto total asciende a 3.000 euros (1.100 en Combarro y 900 en San Salvador).
Ante esta situación, la partida municipal, que asciende a 12,6 millones de euros, incluye una dotación para estas dos comisiones, que aperece definida como mantenimiento, pero que el Ayuntamiento otorga para que los colectivos puedan hacer frente al abono del IBI. Y es que tanto Sobral como Barreiro coincidieron a la hora de tildar de "totalmente inxusta" la situación en la que se encuentran los cementerios vecinales. "Parécenos unha discriminación que a Igrexa non pague e os veciños si. Polo tanto, nós queremos compensar eses custes, que son debidos a unha Lei Tributaria que aprobou hai uns anos o Partido Popular a nivel estatal", recalcó.
Curiosamente, esta explicación provocó uno de los momentos de mayor tensión del debate plenario, ya que, a juicio del Partido Popular, la decisión adoptada por el bipartito es injusta con los otros tres camposantos restantes del municipio. Se trata de los parroquiales de Raxó y Samieira, además del municipal, situado en San Xoán. El edil del principal grupo de la oposición Manuel Domínguez quiso saber la razón por la que esa contribución aparece definida en el documento como ayuda para mantenimiento y echó en falta colaboraciones similares en el resto de cementerios. Su postura recibió el apoyo del portavoz "popular", Ángel Moldes, que dejó claro que "nós non queremos que se lle quite nada a ninguén, senón que haxa máis axudas para todos".
ENMIENDA FALLIDA. El Partido Popular llegó, incluso, a plantearse la posibilidad de presentar una enmienda contra esta medida del bipartito, aunque finalmente acabó por descartar esta posibilidad.
Por su parte, el concelleiro de Facenda explicó que "intentamos realizar bonificacións, pero os informes técnicos desaconsellan esta opción. Polo tanto, apostamos por unha achega nominativa, que ten como obxectivo arranxar o dano que provoca unha lei inxusta".
Luciano Sobral fue más allá al recordar que el Concello ya aporta subvenciones para la puesta a a punto de todos los camposantos, pero matizó que "se aumentamos todas as axudas, seguiremos afondando na discriminación dos que pagan IBI".
