La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha anunciado este lunes que, un año más, rechaza acudir al Parlamento gallego para presentar el presupuesto de la institución provincial para 2020.
En una carta remitida al presidente del Parlamento, Miguel Santalices, Silva apela a la "autonomía local" y al principio de "gobierno autónomo" de las entidades locales que, ha señalado, "no están supeditadas" a las cámaras autonómicas.
La dirigente socialista avanza que las cuentas de la diputación pontevedresa para 2020 se presentarán "ante el órgano en el que hay que presentarlo", el pleno provincial, en donde su gobierno "defenderá sus criterios y sus contenidos" y en el que la oposición podrá presentar sus "alternativas y posicionamientos".
En su misiva, Carmela Silva traslada a Santalices su "plena disposición" a sentarse con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para tratar con él cuestiones que permitan el "avance social, político, cultural y económico" de Pontevedra y establecer los "mecanismos" para mantener una colaboración mutua.
Silva añade también que el presupuesto de la Diputación se remitirá al órgano autonómico competente pero se niega acudir al Parlamento porque, dice, no van "a ser cómplices" para que se "profundice" en la "dependencia" de la administración local que buscan "algunas comunidades autónomas".
"Eso va en contra de lo que establece la Constitución, los estatutos de autonomía y las normas por las que se establecen relaciones de igual a igual en el conjunto de las administraciones públicas", señala la presidenta provincial.
La presidenta de la Diputación de Pontevedra concluye su carta recordando que las entidades locales "no tienen obligación" de dar cuenta a los gobiernos autonómicos de las decisiones que toman dentro de su ámbito de competencia ni "imponer" su comparecencia en sus órganos.
