La cofradía de Arcade acusa a la expatrona de un delito de desvío de fondos

La querella fue presentada por el equipo de Gonzalo Reinoso en los juzgados de Redondela
Una reunión en la cofradía de Arcade. RAFA FARIÑA
photo_camera Una reunión en la cofradía de Arcade. RAFA FARIÑA

La directiva de la Cofradía Virxe do Carmen de Arcade, en Soutomaior, ha presentado una querella contra Rita Míguez, expatrona mayor del pósito y actual presidenta de la Asociación Nacional de Mujeres de la Pesca (ANMUPESCA), por presuntas "irregularidades" en la gestión de las cuentas de la entidad durante su mandato.

Según señala la directiva actual de la cofradía de Arcade en un comunicado, Rita Míguez podría haber incurrido en los delitos de administración desleal, hurto, extorsión e apropiación indebida durante su gestión en los tres años anteriores al relevo al mando del pósito (2016 a 2019).

Precisamente fue en ese año cuando el pósito comprobó que las cuentas "eran totalmente opacas", y encontraron "irregularidades", por lo que encargaron una auditoría externa a la gestión de la actual directiva. Actualmente, al frente del cabildo se encuentra Gonzalo Reinoso, cuyo equipo fue el que debatió y acordó que con el resultado de la auditoría había causas suficientes para pedir que un juez investigue la actuación de Rita Míguez.

Toda vez que ya se ha presentado la querella criminal en los juzgados de Redondela, los socios de la cofradía esperan que "caiga todo el peso de la ley sobre los infractores". Los hechos concretos que refiere la demanda son un supuesto desvío de fondos a favor de la asociación de la que Rita Míguez es presidenta. En tres anualidades distintas, la asociación recibió 54.540 euros del pósito, que, según la versión de la expatrona se debían a un convenio existente entre ambas instituciones. El cabildo insiste en que los pagos no se habían comunicado a los pescadores y en que Míguez no aporta copia del documento o justificante de tal convenio.

A su vez, la directiva actual denuncia que la patrona cobraba las cuotas en días de faena a los que no había podido asistir por estar cumpliendo con sus tareas (remuneradas) al frente del pósito, y cuestionan que eligiese a cuatro personas para las tareas de pesaje (también remuneradas) "cuando en el mejor de los casos deben ser dos".

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