El Concello de Poio gestionará la Illa de Tambo a partir del próximo mes de mayo

Según ha podido saber este periódico, el Ministerio de Defensa y el Gobierno local han acordado una concesión demanial durante 25 años para agilizar el proceso, tras varios meses de negociación
Vista a la playa de Tambo desde la ría. RAFA FARIÑA
photo_camera Vista a la playa de Tambo desde la ría. RAFA FARIÑA

La gestión de la Illa de Tambo por parte del Concello de Poio ya tiene fecha de inicio, y esta vez definitiva. Tal y como pudo saber Diario de Pontevedra, será en mayo de 2022 cuando el Gobierno local pase a asumir estas competencias sobre el territorio, en un régimen de concesión demanial a 25 años. En este sentido, el Ministerio de Defensa y el Concello han llegado a este acuerdo, ya cerrado actualmente, con el objetivo de agilizar el proceso, y que el Gobierno local pueda operar en el enclave antes de la cesión definitiva, que se espera que se firme mucho antes de concluir los 25 años, y tras obtener la luz verde de los informes requeridos por parte de organismos estatales como el Ministerio de Hacienda o Patrimonio del Estado.

De hecho, entre las competencias que otorga la concesión demanial y el traspaso de la titularidad apenas hay diferencias, por lo que, como requisito legal, tan solo quedaría pendiente hacer efectiva esa cesión, si bien desde el mes de mayo el Concello ya podrá gestionar la isla con total libertad.

El Concello pasará a contar con plenas competencias sobre el uso y recuperación de la isla a partir de que el acuerdo se haga efectivo

Las intensas negociaciones para alcanzar este acuerdo definitivo han permanecido activas durante los últimos meses entre el Ministerio de Defensa y la Concellería de Promoción Económica de Poio, que dirige el socialista Gregorio Agís, y quien en mayo de este año estimaba un plazo inferior a dos años para abrir la isla a las visitas. Un plazo que, sin duda, gracias a esta carrera de fondo se ha podido acortar con creces. En este sentido, el también presidente de la Comisión de Seguemento da Illa de Tambo, que ha estado al frente de las negociaciones, avanzaba entonces que la isla se abriría al público con accesos regulados, si bien no ha trascendido todavía de que forma se organizarán las visitas, puesto que eso queda ahora en manos del Concello.

En este sentido, los planes del Gobierno local para la puesta en valor y recuperación de este espacio no parecen haber cambiado. En abril, la Comisión de Seguemento da Illa de Tambo, encabezada por Agís, presentaba un proyecto técnico del arquitecto Sergio Portela con las directrices a seguir para la recuperación patrimonial y natural de la isla, que incluye la recuperación del sistema dunar de la playa, así como del supuesto castro que, según los estudios, se encuentra en la parte más elevada del terreno. El ágora, compuesta por el lazareto, el polvorín, junto a un albergue, la capilla y el faro, son los elementos restantes sobre los que también se acometerá esta puesta en valor. Otro de los retos que ahora tiene por delante el Gobierno local es el acondicionamiento forestal de Tambo, puesto que ya en anteriores ocasiones habían advertido del peligro por incendio que presenta el terreno, totalmente invadido por el eucalipto.

Se estima que la cesión definitiva se produzca en los próximos años, una vez desafectada la isla

Se prevé que, ya alcanzado el acuerdo entre el Ministerio de Defensa y el Concello de Poio, el asunto pase primero por la Comisión y luego por el Pleno de la Corporación, que tendrá que aprobar la firma del convenio a mediados de este mes, y que entrará en vigor en mayo de 2022. Con este trámite, se formalizará el acuerdo de concesión demanial entre ambas entidades por 25 años y que, tal y como ha podido saber este periódico ya es definitivo, por lo que Poio podría abrir la isla a las visitas de forma inmediata a partir de mayo. La cesión definitiva de Tambo se producirá de forma posterior, una vez que la isla y sus elementos queden desafectados del catálogo de bienes del Estado.

SIN ESPECULACIÓN. Desde el inicio del proceso, la Comisión de Seguemento de Tambo ya había dejado claro que el proyecto a acometer en la isla estará al margen de la especulación. Precisamente, este es uno de los factores que propiciaron el buen desarrollo del acuerdo entre Concello y Defensa. Tal y como declarara Gregorio Agís a este medio el pasado mes de mayo, Defensa había mostrado una visión satisfactoria sobre el proyecto de Poio para la isla, y que "as posturas están próximas".

Delimitar el plan de usos y accesos a la que es una de las joyas de la ría de Pontevedra, y cuyo patrimonio ha permanecido casi intacto durante la actividad militar, será ahora el próximo paso para dar respuesta a una demanda histórica de Poio, a punto de convertirse en uno de los hitos de este siglo.

Cronología de la cesión
Tambo dejó de tener uso militar a principios de siglo. Desde entonces, han sido varias las voces que reclamaron una puesta en valor que el Concello comenzó a perseguir bajo diferentes fórmulas, entre las que incluso se llegó a plantear su inclusión en el Parque Nacional de las Illas Atlánticas. En los últimos años, las negociaciones comenzaron a prosperar.

2013. Poio obtiene fondos para realizar un estudio sobre los recursos de la isla y definir el plan de usos.

2017. La Deputación se integra en la Comisión de Seguemento y, junto al Concello, solicitan informes jurídicos para analizar la viabilidad del traspaso. En noviembre, el Pleno de Poio acuerda por primera vez y de forma unánime solicitar la titularidad de la isla.

2018. Un acuerdo entre la Escuela Naval Militar de Marín y el Concello de Poio permite devolver las visitas guiadas a la isla.

2020. Poio desbloquea las negociaciones con el Estado en noviembre y Defensa se compromete a elaborar un informe sobre el valor patrimonial. Quince días después se inicia la fase previa a la cesión y el Concello se reúne con Costas.

2021. Por requerimiento de Defensa, Poio se compromete en el Pleno de enero a asumir la titularidad. En mayo, Concello y Defensa ya trabajan con un borrador de acuerdo, y el buen entendimiento aligera las negociaciones.

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