Comarca de Pontevedra
El Concello de Poio retira tres millones de Abanca por el cierre de sucursales
"Está claro que hai xestións que aínda temos pendentes con Abanca, pero o que son os fondos retirarémolos". Con estas palabras, el alcalde de Poio, Luciano Sobral, salía al paso este viernes de la polémica generada en el Pleno de esta semana ante la falta de respuesta del edil de Facenda, Xulio Barreiro, a la pregunta de la concejala del PP, Rocío Cochón, sobre los fondos municipales atesorados en Abanca.
Los 'populares' criticaron que el Concello diese marcha atrás en el acuerdo plenario adoptado para actuar ante el cierre de la sucursal de Campelo.
Sobral quiso despejar dudas respecto a la polémica y aclaró que aún hay trámites pendientes para culminar el proceso, pero desveló que ya hay una entidad elegida para esta finalidad, además de contactos establecidos con más bancos y cajas en aras a facilitar su instalación en Campelo.
Así, el alcalde ha indicado que el Concello inició un convenio con Caixabank para diferentes operaciones bancarias. "En canto estean finalizados todos os trámites, esta entidade comenzará a traballar co Concello nas vindeiras semanas co obxectivo de poder eliminar todo tipo de xestións coa de Abanca", añadió.
Este acuerdo permitirá materializar la transferencia de fondos y ejecutar el mandato del Pleno, que decidió que se tomarían represalias contra la entidad en caso de que no diese marcha atrás en su decisión de cerrar.
"Non podemos permitir namentres que noutras oficinas manteñen peches parciais, o peche da oficina bancaria de Campelo sexa total, xa que esta presta servizo a milleiros de veciños e veciñas de toda a parroquia de San Xoán e moitos deles con unha idade avanzada con problemas para poder desprazarse a outras oficinas bancarias, polo que esiximos un trato igualitario para os veciños de Poio", añadió el alcalde, que señala que "está claro que a privatización das caixas galegas está a afectar gravemente ao colectivo de maioridade que se ve limitado no seus dereitos a hora de poder acceder a retirada de aforros", ratificó.
Sobral recordó además que en los últimos años, Poio se quedó con la mitad de las sucursales de que disponía y solo quedan dos oficinas de Abanca en todo el municipio, que tiene 17.000 habitantes.
El PP lleva varios días censurando que no se haya movido ficha con respecto a esta decisión plenaria y que, frente a esta aparente "inacción", la medida aparezca ya como realizada en un folleto repartido por el BNG en Campelo.
El PP critica la existencia de dicho folleto, al entender que este era un asunto en el que todos los grupos se habían comprometido a actuar dejando de lado el protagonismo de sus siglas.
