El jabalí se cansa del monte

En lo que va de semana, vecinos de Combarro y Raxó han visto a varios animales en las inmediaciones de los muellres de ambas parroquias. La escasez de alimento es una de las razones de estas incursiones a núcleos urbanos

CADA VEZ son más habituales las escenas del rural en las que fincas y cultivos acaban destrozadas por la presencia de los jabalíes. Lo que ya no resulta tan cotidiano es ver a estos animales asomarse al litoral. Esta insólita escena se ha repetido hasta en dos ocasiones en Poio en lo que va de semana. Primero en Raxó y luego en Combarro, estos animales salvajes no han tenido problema en dar un "paseo" nocturno por las inmediaciones de los muelles de ambas parroquias, lo que ha despertado la curiosidad y, en menor medida, la inquietud de numerosos vecinos.

Algunos de los residentes que han visto a los jabalíes en pleno núcleo urbano no han dudado en echar mano de las redes sociales para colgar sus vídeos, en los que se pueden ver a tres ejemplares en la playa de Raxó. La bajada al arenal tuvo lugar durante la madrugada del pasado 20 de noviembre. Algo más de 24 horas después, se repetía una escena muy similar en Francisco Regalado, el bulevar que une el puerto de A Canteira con la Praza da Chousa de Combarro. Allí, en pleno paseo marítimo, otros tres animales cruzaban despreocupadamente la carretera, forzando, incluso, a que un vehículo se detuviese para dejarlos pasar.

A esta "visita" hay que sumarle la que protagonizó otra familia de jabalíes el pasado viernes a la parroquia de Bordóns. En esta ocasión, el grupo porcino se plantó en Nanín, en plena carretera PO-308, y sorprendió a una patrulla de la Policía Local de Sanxenxo que se encontraban haciendo su habitual ronda nocturna. Ante estos hechos, la pregunta más obvia es por qué los animales abandonan su hábitat natural para llegar a núcleos urbanos. La Comunidade de Montes de Combarro apunta que «en épocas en las que la lluvia tarda en llegar la escasez de alimentos es habitual, por lo que no es raro que animales salvajes como jabalíes o caballos bajen a zonas cercanas para alimentarse». Aunque la presencia en los muelles poienses no deja de ser anecdótico, lo que sí resulta preocupante son los daños causados en cultivos.

XUVIÑO. En zonas como A Armada y O Prado, en Xuviño, hay varias fincas en las que el jabalí ha echado a perder algunas cosechas. El animal no se limita a morder los alimentos, sino que también remueve la tierra, lo que provoca que los daños sean mayores de por sí.

Otro problema tiene que ver con la seguridad viaria. Aunque en sus últimos avistamientos no han provocado incidencias, no es la primera vez que un conductor se encuentra con estos animales en pleno asfalto.

Esta situación se ha repetido en varias ocasiones en la PO-303, que une la parroquia de Samieira con A Armenteira (Meis). El vial autonómico cubre un tramo muy boscoso y en más de una ocasión se han visto por allí caballos, zorros y otras especies, lo que obliga a extremar las precauciones, especialmente en plena noche.

El año pasado, algunos propietarios y la propia Comunidade de Montes de Combarro pusieron en conocimiento de la Guardia Civil estos problemas. No obstante, según apuntan los comuneros, «nos dijeron que no es algo sobre lo que tengan competencias».

Comentarios