Comarca de Pontevedra
La llegada de Vegalsa-Eroski reactiva el interés por los locales del centro de A Barca
Cerrado a cal y canto y los pasillos, vacíos. Es la imagen que ha dejado la marcha de Carrefour en las instalaciones del centro comercial A Barca, cuyos pequeños comercios, casi 15 días después del cierre definitivo, acusan notables pérdidas en la facturación y esperan con impaciencia la llegada del supermercado Eroski, prevista para el mes de noviembre, que permitirá reflotar algunos de los negocios que, en estos momentos, penden de un hilo.
De entre las pequeñas tiendas no especializadas, que antes funcionaban como satélites del supermercado, y que ahora deben mantener su actividad sin este empuje, uno de los casos más alarmantes es el de la administración de Lotería, en la que las ventas han descendido un 70% en esta quincena, desde el cierre del supermercado.
Así lo ha explicado la responsable del establecimiento, Ángeles Lubián, que ha perdido a gran parte de su clientela. "Hay clientes que hace más de un mes que no veo. El supermercado es el eje motor, y si no está, aquí la gente no viene", afirma. En este sentido, teme la continuidad del negocio en los próximos meses, hasta la inauguración de Eroski, y prevé un verano "duro". "Todos confiamos en que el cambio de supermercado será para bien, pero no aguantaremos mucho más. Si las obras no se adelantan y realmente abren en noviembre, esto no va a dar ni para gastos. El verano va a ser una muy mala época. Aquí somos dos persoas, ahora mismo estoy yo sola, y sobro", afirma.
El pico de actividad del centro comercial tiene lugar a última hora de la tarde, cuando la clientela afianzada en los pequeños negocios acude a hacer sus recados, y en las horas centrales de la mañana.
En el caso de la mercería Jota, uno de los establecimientos históricos del centro comercial, la afluencia de clientela ha bajado un 50%, tal y como reconoce Pilar Alape, dependienta del local, que es uno de los negocios que se han visto arrastrados por el cese de la actividad de Carrefour en esta superficie.
Reducción de horarios y la drástica decisión de bajar la verja de forma temporal han sido las medidas adoptadas por algunos de los empresarios que regentan los pequeños negocios del centro comercial. Es el caso de Ana Moldes, empresaria que lleva 15 años desarrollando su actividad económica en A Barca, y que ha decidido cerrar temporalmente Delouxo, un establecimiento de reciente creación, de moda, complementos y decoración, que permanecerá en "stand by" hasta la inauguración de Eroski. "Volverei abrir a tenda cando abra o supermercado, porque polos corredores xa non hai movemento, e este tipo de comercio depende diso. Imos perder tamén ao turismo do verán que paraba nestes comercios de paso que acudía ao supermercado. Agora chegan aquí e atopan un centro comercial baleiro", explica. A pesar de eso, se muestra optimista: "A chegada de Eroski vainos vir moi ben e vai supoñer unha revolución no centro comercial, pero temos que aguantar o tirón".
LOS QUE RESISTEN. El negocio que sí puede presumir de mantener fiel a su clientela en el centro comercial, a pesar de que perderá "aos clientes eventuais" es, precisamente, la peluquería Hair&Colours, otra de las empresas de Ana Moldes, que también es una histórica en A Barca, con 15 años de trayectoria.
"Funcionamos con cita previa, e seguimos tendo á nosa clientela de sempre. Si que perdemos á xente que viña de paso, pero non é unha situación tan mala coma a de outros locais". La próxima apertura de Eroski, confía, supondrá un paso adelante para impulsar sus negocios, en los que no tiene previstos mayores cambios, en una clara apuesta de futuro por el centro comercial.
Al optimismo ante la llegada de Eroski también se suma la Tintorería A Barca, que mantiene afianzada a su clientela de 20 años de trayectoria y que tal y como explica Mónica González, "síguenos respetando". A pesar de ello, no contará "co turista que viña de paso que facía a compra. Antes o verán eran meses de traballar máis, e este non vai ser como todos os anos", afirma.
En el caso de tiendas especializadas como la de Mascotas, la facturación ha caído entre el 30% y el 40%. "A nós repercútenos menos que a outros, pero isto aínda acaba de comezar", asegura Juan Prieto, desde el establecimiento, situado frente al local del supermercado. "Xa se nota agora a baixada de clientela, e só pasaron uns días. Cando comecen as obras e os ruídos isto vai ser un paseo polo deserto".
Eroski ya ocupa la superficie de tres locales comerciales
De este modo, al antiguo local de Carrefour, Eroski añade el que anteriormente ocupaba una juguetería y el de la tienda de reparación de calzado Mister Minit, que lindaba con el supermercado, y que ahora tendrá una nueva ubicación en el centro comercial.
La vocación de expansión de Eroski, en cuyo local ayer ya se apreciaba un movimiento mínimo que preludia el inminente comienzo de las obras, será un impulso para renovar el centro comercial, en el que locales como la cafetería todavía existente permanecen cerrados desde el pico más alto de la pandemia.
