La humanización y reforma de la Rúa Ramón Encinas, en el paseo de Raxó, Poio, permitirá recuperar parte de la fachada costera de la localidad y supondrá una inversión de más de 800.000 euros, financiados con una ayuda de medio millón de euros del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), organismo perteneciente al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Los trabajos contarán con cerca de 800.000 euros de inversión y están ya en pleno desarrollo, aunque, como matizó el alcalde, Luciano Sobral, en el transcurso de la visita, este lunes de la subdelegada del Gobierno, Maica Larriba, "pararanse coa chegada do verán para non interferir na tempada alta e retomaranse despois". El plazo de materialización de esta compleja obra debería completarse durante 2024.
Maica Larriba contó en su visita con la presencia del regidor, así como del responsable de Urbanismo, Gregorio Agís, el de Obras, Julio Casás y la de Espazos Cidadáns, Silvia Díaz.
Durante su visita, Maica Larriba puso en valor esta actuación que además de dotar de un nuevo aspecto el espacio y mejorar la seguridad de conductores y peatones, permitirá renovar lose servicios de saneamiento, pluviales y los sistemas de telecomunicación de esta zona. "Ademais, a intervención tamén contempla a pavimentación de 300 metros de paseo con materiais sostibles, así como a creación de dúas zonas exclusivas para peóns. Unha na parte máis próxima á praia e outra ás vivendas e locais existentes na zona", explicó.
La subdelegada incidió en que estas obras no so redundarán a nivel social, marítimo o turístico, sino que mejorarán de una manera definitiva la accesibilidad y el tránsito peatonal de esta zona costera, favoreciendo además el uso de la bicicleta y contribuyendo a reducir las emisiones y la huella de carbono en la localidad. "Esta iniciativa supón que o paseo de Raxó se abra a todo o mundo e sexa máis verde e inclusivo", destacó.
La intervención está financiada con las ayudas del IDAE para entidades locales. Unas ayudas que en el Concello de Poio han permitido la inversión de más de 3,4 millones de euros de fondos estatales y que ya permitieron sustituir buena parte de sus luminarias públicas por otras de bajo consumo, además de mejorar el Pavillón de A Seca (con el cambio de la envolvente térmica), sustituir la cubierta de la casa del Concello (con una partida concedida en 2019), humanizar el núcleo de Xuviño y mejorar la movilidad peatonal en la carretera que va de Porto Santo a Campelo.
"Intervencións que permiten facer cidade, romper barreiras, garantir un futuro verde para este concello e gañar espazo para as persoas", remarcó Maica Larriba, quien agradeció al alcalde su cooperación.
Intervencións que permiten facer cidade, romper barreiras, garantir un futuro verde para este concello e gañar espazo para as persoas"
Por su parte, el alcalde, Luciano Sobral, destacó la importancia de haber podido conseguir actuar en Ramón Encinas en este mandato y el valor que aportan las inversiones "non só para as obras, senón para dinamizar, xerar emprego e, con iso, xerar unha sociedade máis xusta".
El alcalde destacó la importancia que estas obras tienen para el sector en un punto neurálgico del turismo de Poio, de ahí que se realicen con un plan temporal que permitirá parar en verano para no interferir con el mimos.
A su vez, el edil de Urbanismo, Gregorio Agís, destacó tras la visita que "poucos concellos de menos de 20.000 habitantes son capaces de levar a cabo esta xestión, que tamén se fai realidade grazas á implicación de institucións como o Goberno central ou a Deputación", resaltando los 3,5 millones del IDAE obtenidos este mandato.
Larriba: "O investimento da EDAR será vital para a ría"
La Subdelegada no se quiso olvidar del resto de las colaboraciones por vía estatal que ha tenido Poio recientemente, con casos como la subvención de 158.480 euros en el marco del Pirep Local, para rehabilitar y ampliar la antigua escuela unitaria de Arén, en Samieira.
Además mencionó las obras de mejora de la depuración de la fachada Norte de la ría, recién licitadas y que supondrán que Raxó, Samieira y otros barrios de Sanxenxo dejen de verter a un emisario que no depura las aguas residuales. "Son 29 millóns de euros de investimento vitais para a Ría de Pontevedra e os seus habitantes", apuntó, al recordar el reciente proceso de licitación, que llegó tras un acuerdo entre los dos concellos afectados, Poio y Sanxenxo, y el Ministerio para la Transición Ecológica, a través de Acuaes.
"Estamos recuperando o tempo perdido e facendo realidade demandas e proxectos que estiveron durante anos no caixón", reivindicó, antes de concluir que, en este caso, la colaboración de los concellos y el Gobierno central permitirá que "contemos cunha provincia máis verde e máis sostible".