Ocho identificados en el operativo para dar con los agresores a los policías de Poio

El detenido por la agresión a un guardia civil queda libre ► Los dos agentes fueron dados de alta ► Los vecinos los atacaron con una lluvia de piedras y palos
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photo_camera El coche de la policía atacado y dos momentos de la reyerta. DP

El joven detenido en la tarde del lunes por agresión a un guardia civil durante un operativo de identificación en O Vao de Arriba ha quedado finalmente en libertad, con la obligación de presentarse ante la autoridad judicial cuando sea requerido.

Se le imputa, inicialmente, un delito de resistencia y otro de atentado a agentes de la autoridad, supuestamente producido durante un operativo de identificación por saltarse reiteradamente las órdenes de confinamiento establecidas en el estado de alarma.

Esta actuación policial género un gran malestar entre los vecinos del poblado chabolista, que respondieron con una lluvia de piedras, palos y otros objetos contundentes hacia los agentes. Posteriormente llegó de refuerzo una patrulla de la Policía Local de Poio que fue recibida con aún mayor hostilidad, resultando heridos dos agentes y sufriendo su vehículo policial importantes daños.

OCHO IDENTIFICADOS. La Policía Local de Poio ha informado que los dos agentes que este lunes resultaron heridos como consecuencia de una agresión colectiva en el poblado de O Vao de Arriba han recibido el alta hospitalaria.

La Policía, que participa en el operativo conjunto con la Guardia Civil para identificar a los autores de la agresión, indica que ya hay ocho identificados por su presunta participación en el altercado.

LLUVIA DE PIEDRAS. Los dos agentes resultaron heridos cuando acudieron a un aviso del 112 para el citado barrio chabolista, sobre las 20.00 horas del lunes. En el punto, la Guardia Civil acaba de desarrollar un operativo que se saldó con la detención de un individuo que había agredido a un agente de la Benemérita al ser identificado.

Al reducir a este detenido, los habitantes del poblado empezaron a mostrar su hostilidad lanzando palos y piedras a la Benemérita y dañando sus furgones.

La llegada de los dos agentes de Poio se produjo instantes después de la retirada de la Benemérita, pero con los ánimos aún alterados entre los vecinos de O Vao, que volvieron a cargar con palos y piedras contra la Policía, causando cortes y magulladuras ambos agentes.