El alcalde de Ponte Caldelas, Andrés Díaz, acaba de hacer un balance del trabajo del servicio de la oficina de Urbanismo en el último ejercicio y ha sacado dos conclusiones: la primera, que el interés por construir y asentarse en Ponte Caldelas está más vigente que nunca, y, la segunda, que el modo de proceder de su equipo está multiplicando el trabajo en esta oficina del arquitecto municipal.
Así, en su balance, el alcalde habla de 316 expedientes de urbanismo abiertos en el Concello, de los que más de un tercio son comunicaciones previas de obra menor (un total de 124). Los expedientes de información urbanística copan casi otro tercio de este total, siendo 97 los registrados.
En cuanto a la construcción, Díaz destaca las 25 comunicaciones de obra mayor recibidas este año, que consolidan un despunte en el interés por edificar en el municipio y que son todas propuestas habitacionales. Más de la mitad (un total de 14) son peticiones de licencia para construir casas nuevas. El resto, en su mayoría, son propuestas de rehabilitación de inmuebles existentes.
Esto, destaca Díaz, centra el crecimiento de Ponte Caldelas en el rural y en el ámbito de la vivienda unifamiliar. "Por la edificación colectiva en el centro también hay interés, pero vemos que las empresas no acaban de decidirse", afirma Díaz, que en varias ocasiones ha señalado la escasez de pisos y de posibilidades de alquiler que hay en la villa, derivada del interés que suscita entre nuevos posibles moradores.
Una de las pegas que encuentran los promotores de obra colectiva es que en varias zonas del centro no existe la posibilidad de edificar en altura, lo cual hace menos interesantes económicamente las propuestas.
En lo que va de año, además, se han concedido 13 licencias de nueva ocupación. Las obras municipales, a su vez, han generado la creación de otros 11 expedientes. El regidor destaca que se acabó la era del "ti vai facendo" y que ahora todo el mundo pide permisos y tramita sus licencias regladas para contar con totales garantías jurídicas.
