Comarca de Pontevedra
Beatriz Álvarez-Guerra, la joven actriz que murió en Cerdedo
El puente de Loureiro pasará a ocupar durante años un espacio luctuoso en la memoria colectiva por las trágicas circunstancias del accidente que segó la vida de la joven de 28 años Beatriz A. G. esta misma semana, pero en Cotobade todos recuerdan que el Almofrei fue testigo ya de dos muertes en el mismo punto.
Se trata de un accidente trágico sucedido hace exactamente 20 años y una semana, en el que el turismo se cayó por el mismo puente y el resultado fue mortal, en ese caso, para los dos ocupantes: un matrimonio de septuagenarios que residía en Pontevedra y que regresaba de pasar un día en su casa de Augasantas.
El siniestro se produjo un jueves 26 de septiembre de 2002 cuando la pareja volvía a casa, y, por causas que en ese momento fueron investigadas, el conductor, el exconcejal del Gobierno local de Cotobade Félix Carballal, no trazó la curva y acabó precipitando el coche al río en un momento en el que ningún otro turismo ni testigo presenció el siniestro.
El turismo cayó, al igual que en este caso, totalmente volcado, pero se desconoce si Félix, de 79 años y Trinidad, de 76, fallecieron a causa del impacto o por no poder liberarse de los cinturones de seguridad. Las crónicas de ese accidente, entre ellas la de Diario de Pontevedra, firmada por la periodista Estrella López, recogieron la complicada situación que se generó en el rescate. Los familiares de Félix y Trinidad alertaron a la Guardia Civil cuando notaron que tardaban demasiado en volver a casa, pero el coche no fue hallado por el dispositivo de búsqueda hasta las cinco de la madrugada. Posteriormente, se inició la complicada tarea para dar la vuelta al coche y rescatar los cuerpos, tarea en la que cooperaron, como en el caso de la fallecida el martes, los Bomberos de Pontevedra, la Guardia Civil y numerosos vecinos.
Félix Carballal había sido concejal en el Gobierno de Ramón Abal Varela y tanto él como su esposa, Trinidad Pérez, eran muy conocidos y apreciados en el municipio, así como en Pontevedra. Su muerte consternó incluso a parte de la sociedad de Sanxenxo, ya que eran suegros del sagento jefe de la Policía Local de esta localidad, Manuel Ferreiro.
