Muere por covid el padre de la víctima más joven del área sanitaria de Pontevedra

Dos semanas después de la muerte de Adrián, el vecino de O Vao de 31 años, este viernes despidieron a su progenitor, de 54
DAVID 9.00 en diante. O Vao, fase final do cribado iniciado por Sanidade. Carpa ara choiva, veciños do VAO de Abaixo e veciños do Vao non chabolista., miércoles, 20 ene · 9:00–10:00
photo_camera Un imagen tomada en O Vao con motivo del cribado que arrancó el 18 de enero. D. FREIRE

Una mala noticia pone el broche luctuoso al paso de la tercera oleada de covid-19 por la barriada de O Vao, en Poio.

Un hombre de 54 años de edad se convirtió el jueves en la segunda víctima mortal de la pandemia en la zona chabolista y la víctima número 143 del área sanitaria desde el inicio de la crisis sanitaria.

El fallecimiento, notificado este viernes por el Sergas, se produjo después de que en los últimos días empeorase el estado del enfermo, que era el padre de Adrián, el joven de 31 años que falleció el 5 de febrero y que fue noticia por convertirse en la víctima más joven del área sanitaria y la segunda de menor edad de Galicia.

Si el fallecimiento del joven, hace dos semanas, fue un golpe duro, no solo para la familia, sino para toda la vecindad, el deceso de su padre, ha sido acogido con desolación por los vecinos. El fallecido fue velado en el tanatorio de Barro y despedido en el cementerio de San Mauro, este viernes por la tarde.

Era el único vecino del barrio chabolista que seguía ingresado en el Chup. Había sido feriante y el primer pastor evangélico en la zona

Según los cálculos de los residentes en la zona, no quedarían, tras este óbito, vecinos de la barriada chabolista ingresados en Montecelo por culpa del virus, después de que en jornadas recientes recibiese el alta otro joven menor de 30 años que también necesitó cuidados intensivos.

Este fallecimiento llega en un momento en el que, al menos en la zona de O Vao de Arriba, la mayoría de las personas contagiadas está de alta y no quedan prácticamente familias en cuarentena.

Han podido recuperar la normalidad, y con ella, cierta tranquilidad, eso sí, empañada por el luto por sus fallecidos. "Todo el mundo sigue con su vida normal, pero tomando precauciones ahora", indican fuentes conocedoras de la realidad en la zona. La familia afectada por las dos muertes era conocida dentro y fuera de O Vao, pues el padre había sido feriante, con un puesto de textil en distintas ferias, entre ellas, la de Pontevedra, labor que dejó al declararse la crisis sanitaria. Además, había ejercido como pastor evangélico también en la barriada, cediendo el relevo, con el paso de los años, al actual responsable religioso.

Hace exactamente un mes que se detectó un incremento explosivo de los contagios en O Vao de Arriba y O Vao de Abaixo en donde el Sergas inició el primer cribado masivo en Poio, en el que participaron 327 personas, de las que 71 vecinos, un 21% , salieron positivos.