El incendio de A Lama se salda con un perro muerto y graves daños materiales

Una vivienda unifamiliar habitada ardió por completo en el transcurso de esta Nochebuena en Xesta, A Lama, a pesar de los esfuerzos de los propietarios y los vecinos por aplacar las llamas. Sucedió, según el parte del Servizo de Emerxencias 112 a las 21.50 horas, cuando un particular dio la voz de alarma. Aunque se movilizó a Protección Civil Oitavén-Tea, al GES de Avión y a Bombeiros do Salnés, a la llegada de estos últimos poco se podía hacer por salvar la casa.

Fuentes municipales, tras consultar con la familia afectada, indicaron que el suceso se produjo al sobrecalentarse una freidora con la que se estaba preparando la cena de Nochebuena. Tres mujeres: una vecina que retornó de México para estas fechas, su madre y su suegra, iban a pasar juntas la celebración en la residencia. Ninguna de ellas fue capaz de controlar la situación: la freidora generó una gran humareda, y al abrir las ventanas para poder ver, las llamas se avivaron de modo que fue necesario que se pusieran a salvo de inmediato.

El fuego corrió tan deprisa que, aunque no generó víctimas personales, fue imposible poner a salvo a la mascota de la familia, un perrito que pereció porque se encontraba en otro cuarto al que fue imposible acceder. Todos los bienes personales de la familia también ardieron.

Al problema generado por la expansión del fuego se añadió el de recibir un servicio de emergencias que se encuentra en otro extremo de la provincia. Como suele suceder en las emergencias por fuego en A Lama, los Bomberos avisados fueron los de O Salnés, cuyo equipo tardó más de una hora y cuarto en llegar al punto, según indicaron fuentes presenciales.

Consultados sobre el asunto, los efectivos del parque de Ribadumia calcularon que llevar el camión lleno de agua en el punto donde fue requerido les llevó "unos 60 minutos". Desde el mismo parque indicaron que en el transcurso del viaje se llamó varias veces al 112 para indicar que el tiempo de respuesta sería de una hora. A su llegada, el camión superaba las dimensiones del camino, por lo que hubo que colocar una extensión de una manguera de unos 100 metros para poder aplacar las llamas. La intervención sirvió para evitar que el fuego pasase a otras edificaciones próximas, aunque la vivienda colapsó y se quedó sin tejado. La intervención se completó sobre las 3.00 de la madrugada y pone de relieve la importancia de despejar la zona de sombra de los servicios de emergencia en la que se encuentra A Lama, que tiene uno de los tiempos de respuesta más largos de la provincia.