Seis viviendas de Poio son atendidas por el Concello con el protocolo especial de recogida de basura con riesgo biológico, y otras diez casas están en la lista de atención de Servicios Sociais por estar habitadas por mayores que carecen de familiares o allegados en disposición de asistirles en la realización de compras, viajes a farmacias y otros recados de primera necesidad. Son las actuaciones en materia de asistencia coordinadas desde la Comisión de Emerxencias do Covid-19 en interacción con los servicios municipales y Servizos Sociais.
El alcalde, Luciano Sobral, la edil de Seguridade Cidadá, Marga Caldas, y el jefe de la Policía Local, Antonio Duarte, realizaron este miércoles una comparecencia para analizar las medidas adoptadas en las casi tres semanas desde que se inició el estado de alarma. El regidor agradeció la implicación de los trabajadores municipales, de los cuerpos de seguridad, de los voluntarios y de los propios vecinos, para superar el confinamiento. "Pode que aínda nos falte, pero estou convencido de que o superaremos", indicó, antes de reconocer que había llamado para animar personalmente a todos los vecinos que conoce y de los que sabe que "están pasando" pola infección.
Marga Caldas, a su vez, dio cuenta de las actuaciones de todos los servicios y explicó la ingente labor realizada en materia de limpieza y desinfección de centros públicos, con especial incidencia en la residencia de la tercera edad, así como medidas de apoyo a los mayores desde las llamadas a todos los que superan los 65 años para conocer sus posibles necesidades, hasta la respuesta a las familias que avisan de que están en cuarentena o superando la Covid-19 en sus domicilios y que necesitan apoyo para la entrega de compras y medicamentos como para la retirada separada de su basura.
La respuesta a los mayores y colectivos vulnerables es uno de los ejes de actuación del Concello, que además del personal del SAF. de la Policía y de Protección Civil cuenta, desde la semana pasada, de una bolsa de apoyo para este último cuerpo.
En cuanto a la actuación policial, todos coincidieron en que ha tomado especial relevancia sen la emergencia sanitaria. Primero para informar y clausurar los espacios públicos como parques y jardines, y, desde entonces, para actuar ante quienes se saltan el estado de confinamiento. Se suman ya 110 denuncias contra ciudadanos que han salido sin justificación a la calle. En cinco casos, se trata de reincidentes que acumulan dos partes. "Non se practicaron detencións, pero chegado o caso podemos valoralo". destacó el jefe de la Policía. En cuanto al tráfico, se han realizado, desde el estado de alarma, 70 controles estáticos en los que se han supervisado unos 3.500 vehículos e identificado a una media de 50 conductores por actuación. "A partir de ahora será obligatorio llevar el permiso y enseñarlo, así que pedimos a los conductores que lo tengan a mano para facilitarnos el trabajo y que todo sea más rápido", indicó Antonio Duarte.
En cuanto al resto de tareas de custodia de la ciudadanía, el jefe de la Policía pidió a los vecinos que no duden en llamar si saben de algún mayor que pueda estar pasando solo el confinamiento. "Se fai días que non o ven ou non saben del, se non resposta ás chamadas, ou se sospeitan que calquera veciño o pode estar a pasar mal". Se han atendido 1.300 llamadas con dudas, en especial sobre la enfermedad y las condiciones en las que se puede o no se puede salir a la calle.
