Los fuertes vientos fueron los principales protagonistas entre los efectos de la borrasca Hortense en la comarca. De todos los concellos del entorno de Pontevedra, el más afectado volvió a ser Poio, en donde, en el paseo de Lourido voló la cubierta del edificio del restaurante Xantares Galegos. Se trata de un edificio de varias plantas con fachada al paseo del que salieron despedidas las planchas protectores.
[Un árbol caído en Ponte Caldelas. EP]
La Policía de Poio y Bombeiros do Salnés, de la base de Ribadumia, se encargaron este viernes por la mañana de asegurar la zona.
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En el resto de la comarca destacaron los anegamientos en las redes pluviales y alcantarillado, y la caída de árboles, ramas y postes generalizada, aunque que no llegó a ocasionar grandes destrozos. En Vilaboa, algunas marquesinas de autobús amanecieron sin los cristales y en el Concello de Ponte Caldelas, los operarios municipales se pasaron varias horas retirando árboles y ramas.
[Una marquesina rota en Vilaboa. DP]
INCIDENCIAS EN O PORRIÑO Y REDONDELA. La borrasca también causó un accidente en O Porriño tras la caída de varios árboles en la A-55 y el levantamiento de la cubierta de un edificio de Redondela, que ha impactado en el tejado del ayuntamiento, donde ha creado un agujero.
En declaraciones a Europa Press, el concejal de Medioambiente de Redondela, Roberto Villar, ha precisado que las fuertes rachas de viento registradas en las últimas horas provocaron el levantamiento de la cubierta de un inmueble anexo al edificio consistorial que golpeó el tejado de este último, lo que generó un agujero de "varios metros cuadrados".
Del mismo modo, ha apuntado que efectivos de los servicios municipales se han desplazado a una vivienda de Camiño da Bruxa, en Chapela, en cuyas inmediaciones se produjo la caída de un árbol. Como consecuencia, se vieron afectados el muro, el porche, un alero del tejado y el cableado telefónico del inmueble, así como dos vehículos. Dado que la compañía aseguradora comunicó que no prestaría asistencia hasta pasadas 72 horas, efectivos municipales retiraron los restos del árbol.
Adicionalmente, se detectó la caída de un árbol en la rúa Cubilló, en Chapela, que fue preciso retirar dado que obstaculizó el paso en la vía, así como el desplazamiento de contenedores y letreros en distintos puntos del término municipal. El edil ha señalado que el temporal también afectó al suministro eléctrico en las parroquias de Redondela.
Por otra parte, la borrasca Hortensia produjo la caída de varios árboles sobre la A-55, a la altura de O Porriño, lo que causó una colisión en cadena de varios vehículos en la madrugada de este viernes que no dejó heridos.
Así, tras ser requerida por el 112 Galicia, la agrupación de voluntarios de Protección Civil ha retirado los árboles, caídos en el punto kilómetrico 22, en sentido Tui, en la recta del polígono de As Gándaras.
Además, el servicio de Protección Civil ha recogido árboles caídos en las zonas de Filgueira-Mosende y Casal do Vello-Torneiros y la carretera PO- 331, que discurre entre O Porriño y Gondomar. También ha retirado un poste telefónico desprendido en Torneiros y chapas de un galpón en Chenlo, además de achicar balsas de agua en varios puntos del casco urbano de O Porriño y el polígono de A Granxa.
MÁS DE UN CENTENAR DE INCIDENCIAS EN VIGO. Mientras, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha explicado que entre las 22.00 horas de este jueves y las 8.00 horas de este viernes los bomberos y la Policía Local atendieron 114 incidencias debido a la borrasca.
En concreto, ha indicado que el temporal afectó a 34 árboles, dos ventanas de viviendas situadas en edificios, un arco de la iluminación navideña, un poste y un muro y causó la inestabilidad de un andamio de obra, que requirió de la actuación de efectivos municipales.
Paralelamente, la borrasca desplazó 32 contenedores y provocó la caída de cuatro chapas y planchas y cinco vallas, así como la de una persona que se encontraba en un cajero. El regidor también ha señalado que tres zonas de la ciudad se quedaron temporalmente sin suministro eléctrico a causa del temporal.
Asimismo, en el campus universitario se alcanzaron rachas de viento de 77 kilómetros por hora, que en las Illas Cíes ascendieron a 105 y, en las inmediaciones del Puerto de Vigo, a 91.
