La polémica de las obras de reforma de la Praza de España de Ponte Caldelas vivió este lunes un nuevo capítulo con el corte de abastecimiento planificado por las empresas constructoras desde primera hora de la mañana, que teóricamente se iba a prolongar hasta las 10.00 y que, tras una sucesión de imprevistos con los que no contaban los profesionales, acabó durando hasta las 15.30 horas.
La coincidencia de esta situación con el día de celebración de la feria bimensual en el Concello, así como el hecho de que ni los negocios ni los particulares habían hecho aprovisionamiento de agua al pensar que el corte duraría dos horas, acabaron de crispar los ánimos en la villa, provocando que el PP emitiese un airado comunicado quejándose de la "regresión" vivida en la jornada, en la que muchos vecinos tuvieron que bajar a las fuentes o al río para poder cocinar o usar el cuarto de baño.
A su vez, el alcalde, Andrés Díaz, acabó pidiendo perdón –en su perfil oficial de Facebook– y asumiendo las responsabilidades, no sin antes culpar al PP de la "herencia recibida" puesto que el origen del retraso es, apuntó, "o mal estado das tubaxes" que conducen el abastecimiento por las principales calles del centro.
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Imágenes de vecinos de Ponte Caldelas portando tinajas, este lunes. PP
COMPLICACIONES. El Gobierno tripartito había realizado un par de reuniones para coordinar los trabajos para iniciar la habilitación de más de 4.000 metros de espacio peatonal en la cabecera de la Alameda y parte de la Avenida de Vigo. El primer corte se realizó entre las 17.00 y las 19.00 horas del 25 de octubre y el Concello avisó con poca antelación. El anuncio del corte llegó a tiempo, pero la rotura de una de las tuberías obligó a los operarios a desplazarse a Vigo para conseguir las piezas necesarias con las que reponer la avería. La situación se complicó y los trabajos que iban a requerir dos horas se prolongaron siete, ante el descontento general, en especial –según el PP– de los negocios que suelen tener mayor tirón en el día de feria.
A medida que la situación se iba prolongando, los hosteleros optaron por acudir a las fuentes en el centro de la villa para poder ofrecer los servicios básicos, mientras que en algunos casos se decidieron también a echar el cierre en los aseos, al quedar inutilizados los cuartos de baño.
El corte afectó a la Avenida de Vigo y a parte de la Rúa Ponte, según las fuentes consultadas, dado que el Concello no llegó a hacer recuento de calles o familias desabastecidas. El comunicado oficial, en el que se anuncia la necesidad de hacer un estudio de la red de agua, tras las "sorpresas" encontradas con motivo de la obra del lunes, se explica que la intención originaria era "subministrar alternativamente dende a Avenida de Vigo, en lugar da Avenida de Pontevedra, aproveitando a existencia dun circuíto circular na praza de España. A sorpresa chegou ao comprobar que tal circuíto non funcionaba ao abrir as chaves".
"Atopámonos cun auténtico caos no que non se sabe exactamente por onde van as tubaxes, hai unha selva de chaves, cruces e unha rede obsoleta, feita aos cachos, e que seguramente calquera día nos dará un serio desgusto", reitera.
Castro añade su sospecha de que Díaz quiere "chegar como sexa á festa de fin de ano coa praza lista para inaugurala a bombo e platillo cunha grande orquestra que mitigue os bandazos que van dando a medida que se atopan coa oposición veciñal".
