PONTEVEDRA. El presidente de Portos de Galicia, José Juan Durán, explicó el jueves en la sede de esta entidad en Pontevedra los detalles del nuevo proyecto que la Consellería de Mar desarrollará en Campelo, Poio, a través de este departamento.
La Consellería de Mar dotará el puerto de 30 nuevas plazas de amarre destinadas al sector profesional que habían sido demandadas previamente por los responsables de las cofradías del fondo de la ría.
La propuesta presentada por la Xunta consiste en la dotación de cuatro nuevos módulos de pantalán que generarán una línea de atraque de 42 metros de longitud lineal. En ese espacio se podrán habilitar, en total, las 30 plazas comprometidas por el departamento autonómico, que tendrán dimensiones adecuadas para embarcaciones pequeñas y medianas.
Así, la mayoría de las plazas (un total de 24) se destinarán a embarcaciones de seis metros, mientras que otros cinco puntos de atraque serán para embarcaciones de ocho metros y una de las plazas permitirá el amarre de un barco de 10 metros.
El presidente de Portos adelantó que el coste estimado de la actuación será de 50.000 euros, mientras que el plazo de ejecución de la misma será de seis meses, una vez que se inicien los trabajos.
Aunque la obra está aún en proceso de contratación, el responsable de Portos estima que los trabajos podrán estar terminados de cara al final del próximo verano.
Portos de Galicia pretende que esta actuación permita responder de un modo efectivo a la demanda comunicada reiteradamente por el sector profesional, dado que en Campelo opera una parte muy importante de los efectivos de la Confraría de Pontevedra.
La colocación de los pantalanes es fruto de las sucesivas reuniones mantenidas por Portos de Galicia con los patrones mayores de las tres cofradías del fondo de la ría, que alertaron en numerosas ocasiones de la escasez de espacio para los profesionales en este puerto, que alberga la lonja en la que operan Raxó y San Telmo.
En el encuentro mantenido por el presidente con los patrones mayores a finales del año pasado Portos solicitó, incluso, una lista de embarcaciones para poder calcular de un modo ajustado las necesidades del sector.
De esa lista, supuestamente, se han extraído los datos para diseñar el nuevo atraque, que contará con cuatro módulos y con elementos que facilitarán el acceso a las embarcaciones en condiciones de seguridad.
Este proyecto completa un año de inversiones en Campelo por parte de Portos, que despidió 2017 con el dragado de toda esta zona y desarrolló, recientemente, otras mejoras en el espacio exterior de la lonja. En cuanto al dragado, esta actuación también contó con 50.000 euros y sirvió para resolver, mediante la retirada de 3.000 metros cúbicos de sedimento marino, los problemas de escasez de calado de la entrada en este puerto.
Así, desde entonces, los marineros (unas 50 embarcaciones operan en la zona) no tienen que esperar a la pleamar para desencallar sus embarcaciones del lodo, como sucedía anteriormente cada vez que bajaba la marea. Los pósitos del fondo de la ría reivindican estas actuaciones de apoyo por su importancia para poder desarrollar la actividad pesquera.
