El municipio de Poio fue escenario de una manifestación vecinal contra la subida de impuestos aprobada por el tripartito. El PP, que convocó la marcha, eligió la fórmula de caravana de turismos para cumplir así con las medidas sanitarias y hacer visible el respaldo que tiene su postura sobre las recientes aprobaciones de modificaciones fiscales que afectarán a la viñeta y al IBI de las segundas viviendas vacías.
La concentración tuvo lugar en la explanada de A Seca, de donde, custodiada por la Policía Local y la Guardia Civil, la hilera de coches partió para recorrer la PO-308 en dirección A Barca y, posteriormente, en dirección Raxó, antes de volver al punto de partida en donde el líder del PP, Ángel Moldes, volvió a reivindicar menos presión fiscal y a pedir que se bajen, no solo los dos impuestos que fueron modificados en el último Pleno, sino otros que el PP viene denunciando como parte de una carga fiscal "excesiva" para los poienses, como vados, basura o plusvalías.
La cita reunió a más de 200 coches según los convocantes, aunque la Policía Local rebaja la cifra a 120. "A caravana chegaba a Avenida de A Barca e a cola aínda estaba en Campelo", explicó Moldes este domingo, para resumir el impacto de la manifestación y agradecer el apoyo recibido.
El portavoz del PP recordó que "o Goberno vai no sentido contrario ao que demanda a veciñanza. Débense cobrar impostos adecuados aos servizos", apuntó, y censuró la propuesta aprobada de "subir a viñeta a turismos e furgóns de ata 3.500 quilos" y la de aumentar el cobro a los dueños de segundas residencias vacías, algo que el PP recurrirá "en canto se publique" en los tribunales. "A xente está cansa de que cada tres meses suban impostos distintos e de que as bonificacións non sexan acordes coas demandas dos colectivos, como sucede coa bonificación a familias numerosas, que afecta ás que teñen rendas de menos de 30.000 euros cando os colectivos demandan que se teñan en conta as rendas per cápita", indicó Moldes.