Un soplo de esperanza para las peticiones de Pomba

La vecina de A Lama Pomba Longueira Lis, que hace una semana y media padeció un accidente durante una quema de rastrojos en el que sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en el 25 por ciento del cuerpo, recibió este miércoles un soplo de esperanza para su petición de que el Sergas admita su traslado a Povisa desde la Unidade de Queimados del Chuac (Juan Canalejo) para poder mantener el vínculo con su bebé de 12 meses y no perder la lactancia por culpa de este accidente.

Longueira Lis, que hizo un llamamiento en las redes sociales el pasado viernes, cuando supo que iba a ser trasladada al Chuac desde Povisa, sigue ingresada en la unidad de quemados, pendiente de dos intervenciones de injerto para tratar sus quemaduras más graves. Sin embargo, desde que su caso se difundió varias instituciones y colectivos se han interesado por mediar para que consiga su petición.

Uno de ellos ha sido el propio alcalde, Jorge Canda, quien indicó el miércoles que se dio aviso "aos Servizos Sociais para que se poñan en contacto coa nosa veciña e tamén coa familia que lle está a coidar o bebé, para saber o que poden necesitar e axudar no que sexa preciso".

Otra de las personas que intervinieron en su favor fue el responsable de la Plataforma de Emerxencias Verdugo Oitavén, un colectivo con base en A Lama y Ponte Caldelas que reclama una ambulancia y más medios para los servicios del Sergas en la zona. El presidente, José Pardo, remitió un correo al gerente del área sanitaria, José Ramón Gómez, quien hizo un hueco en su agenda para reunirse con Pardo y tratar este asunto. José Ramón Gómez analizó el caso e indicó que, una vez que se complete el periodo de tratamiento que hace precisa la presencia de la vecina de A Lama en el Chuac no se descarta su traslado, bien a Povisa –si sigue necesitando atención en una unidad de quemados–, bien a Montecelo –si no requiere un cuidado específico–.

Con ese traslado, que queda a expensas de la evolución de la paciente y del criterio de sus médicos, se facilitaría que, en cuando deje de ser necesario el aislamiento, la madre reciba la visita del pequeño y se mantenga el vínculo entre ambos que es necesario para favorecer el mantenimiento de la lactancia.

Por su parte, los servicios de comunicación del Chuac destacaron este miércoles que el criterio que obliga a que Pomba Longueira Lis esté ingresada en su unidad de quemados es puramente médico. "A paciente presenta feridas que son para tratar nunha Unidade de Grandes Queimados e o Chuac ten a única de Galicia e o Noroeste de España", afirman.

Longueira ya había adelantado que estaban planificados dos injertos de piel en las zonas más dañadas por las quemaduras. Las lesiones de tercer grado exigen este tipo de intervención para regenerar de la mejor manera posible las zonas dañadas.

Además de estas muestras de apoyo, la formación municipal de Ciudadanos A Lama también presentó un escrito en el Concello para pedir al Gobierno local que interceda en favor de la petición de la mujer y que se preste todo el apoyo necesario a esta familia.

Pomba Longueira reside en O Toxal desde hace año y medio y es madre soltera con pocos recursos. Al carecer de posibilidades económicas, tanto ella como la familia que cuida de su hijo, no puede pedirles que le lleven al bebé a A Coruña para verle cuando deje de estar en aislamiento por culpa de sus lesiones.