La única redera en activo en el puerto: "O oficio pérdese e ninguén quere aprender"

Lleva 48 años de dedicación aunque, reconoce, vivir de ello se antoja difícil: "Pago autónomos e pouco máis"
Sinda Casais, última redera en activo de Raxó y Combarro. DP
photo_camera Sinda Casais, última redera en activo de Raxó y Combarro. DP

Sinda Casais, de Raxó, puede considerarse la última redera de Combarro, aunque este es un título con el que no está cómoda por ser de la parroquia vecina y trabajar para la Confraría de Raxó y su agrupación de a flote. Sinda, -que no culta su sorpresa por saber que el Concello quiere que parte de Francisco Regalado pase a ser Paseo das redeiras-, no puede deshacerse fácilmente del título de última redera de Combarro porque, en primer lugar, trabaja en la caseta de pescadores número cuatro de este puerto, y, en segundo, es la única que ejerce en Combarro y Raxó "e non coñezo a nalgunha outra en activo". 

Poco amiga de las fotos y de los reconocimientos, esta mujer de 57 años puede decir que lleva 48 años en el oficio "pois con nove anos aprendín por primeira vez e xa, non quixen facer outra cousa, con 12 deixei a escola". Afirma que "este é un oficio que se está perdendo e non queda quen o queira aprender". Ella empezó de niña, con otras rederas de Raxó, pero ahora, ni allí quedan rastros del gremio. "É un traballo que me gusta, pero por facer ou reparar unha rede sacas 13 euros, hoxe en día. Pago autónomos e pouco máis, non un soldo. Esixe moito e non dá beneficio", explica. Asume con cierta timidez eso de que Francisco Regalado pase a tener el nombre del oficio que ya sólo ella salvaguarda en esta villa, y reconoce que, pese al tirón turístico del lugar, de sus redes nunca han pedido para decorar establecimientos, hacer exhibiciones o venderlas como recuerdos.

Comentarios