"Se van abandoar o rural, que o digan e que deixen de cobrar tamén os impostos"

Campo Lameiro se rebela contra el cierre de Abanca, que dejaría sin servicio a pensionistas y al pequeño comercio, pero también a firmas que facturan millones de euros al año
 
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photo_camera Pancarta del Concello instalada sobre la sucursal bancaria. D. FREIRE

CAMPO LAMEIRO. El Concello de Campo Lameiro vive una auténtica rebelión, tras conocerse la intención de Abanca de cerrar su sucursal en la localidad. Este es el único banco que tiene el municipio y, si se cumple el cierre, anunciado para las primeras jornadas de septiembre, Campo Lameiro será el único concello de la comarca sin ningún banco y uno de los pocos de la provincia que carecen de entidad financiera con sede en su territorio.

La noticia, que llegó hace apenas unos días al despacho del alcalde y solo 24 horas después, por carta, a todas las casas del municipio, sentó como un jarro de agua fría a vecinos, empresarios y políticos, que defienden que este cierre será la estocada definitiva para el delicado equilibrio social en un Concello con un más de un tercio de sus habitantes en la franja de la tercera edad (615 de los 1.778 vecinos que constan en el IGE tienen más de 65 años).

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La decisión del Gobierno local de convocar una manifestación y de nombrar persona 'non grata' a Juan Carlos Escotet, ha atraído al Concello a varias televisiones haciendo que las protestas vecinales llegasen a las pantallas de todo el país como muestra de la falta de apoyos que reciben los pueblos de la conocida mediáticamente como 'España vaciada'.

El alcalde, Carlos Costa, explicó este jueves que, de momento "a nosa maior esperanza é non ter que declarar a Escotet persoa non grata e manter o banco". Para ello tiene en agenda dos reuniones: la primera, el martes, con agentes comerciales de la entidad, y, la segunda, en otros siete días, con una responsable provincial. Sobre la mesa, Carlos Costa, pondrá los argumentos que todo el mundo repite desde que se conoce la noticia: "Non se entende que se peche esta sucursal sen negociar, nin reducir horarios nin aviso previo. E non se entende porque o local é deles, co cal, o único gasto que terían serían as nóminas do persoal". A mayores, el alcalde recalca que "sempre foi unha sucursal con moita actividade e da que non creo que se poida dicir que dea perdas".

En cadena. Carlos Costa señala que los principales afectados serán "os xubilados, e as persoas que dependen do banco e non poden usar a banca electrónica. Moitos deles veñen en taxi unha ou dúas veces ao mes a cobrar a paga e fan as súas compras".

Si ahora el banco de referencia está fuera, deduce el alcalde, "as compras e servizos tamén se consumirán nesas outras localidades". El cierre, pronostican todos, tendrá un efecto dominó muy pernicioso en la economía local.

A la decisión de manifestarse, se han sumado ya las muestras de descontento de los clientes. Una de las taxistas de Campo Lameiro, Gemma Torres, ha sumado más de diez viajes en los últimos días "de persoas maiores, asustadas, que veñen ao banco a ver como poden facer a partir de agora".

Jorge Caeiro, un empresario de la localidad recuerda que la firma es propietaria del local "polo que os gastos que teñen aquí son mínimos"

La taxista indica que las colas han aumentado en el exterior de la sucursal y lamenta que los primeros golpeados por este cierre sean "os que teñen que recurrir a un taxi para poder cobrar a pensión e que, aínda por enriba terán que pagar máis, pois non custa o mesmo vir ata o centro que facer os oito quilómetros que hai ata Moraña ou os 20 que teñen ata Pontevedra".

Sin causa. A la voz de Gemma, se suma la del empresario Jorge Caeiro, responsable del bar restaurante Casa Tito y de la tienda de alimentación. "Non é só o problema que nos poida ocasionar pola falta de lugares onde facer ingresos, ou por deixar de ter un servizo, é que nos causa descontento por consideralo un peche inxusto e inxustificado. Se a caixa é propietaria do local e se ten dous empregados, por que non plantexa unha redución de horarios, de persoal, ou calquera outra medida? Por que, de inicio, xa propuxeron o peche total?".

Caeiro defiende que "cónstame que todos aquí fan transaccións co banco. Dubido que se poida considerar que dá perdas" y reivindica que "os que din que non se pode abandoar o rural non poden consentir isto. No caso contrario, que o digan e que nos deixen tamén de cobrar os impostos, xa que nos quedamos sen os servizos".undefined

Pero no solo las pequeñas empresas están contrariadas ante el cierre de la sucursal. En el polígono industrial de Redonde, uno de los buques insignia que este concello, que genera 39 empleos y factura unos 11 millones de euros al año, tendrá que buscar soluciones para sus operaciones de efectivo que se realizaban, hasta el momento, a diario, en estas instalaciones bancarias.

María Quintas, CEO de Grupo Quival, que congrega a su marca más visible, Frutos Secos El Nogal y a Comercial Valquín (firma que importa gran parte de la piña en conserva que posteriormente se envasa en España), expresó este jueves el malestar de la empresa.

"Gran parte de los empleos que generamos son de personas que viven en la localidad. Operamos con varios bancos, pero también recurrimos a diario a la sucursal de Abanca en Campo Lameiro, sobre todo, para la realización de ingresos de efectivo y otras operaciones. Este cierre nos obligará a buscar otra solución, tal vez en Pontevedra, o en otra localidad y afectará al resto de autónomos y pequeñas empresas".

De momento, los vecinos siguen con sus planes de manifestarse el próximo viernes en el centro de la localidad para tratar de hacer entrar en razón a los directivos de la entidad bancaria, aunque no falta quién ya ha preguntado cómo cancelar sus cuentas.

"Tamén estamos buscando alternativas por se ao final pechan" 

Así lo asegura el alcalde de Campo Lameiro, Carlos Costa, que asegura que "ademais das conversas pendentes cos responsables de Abanca, estamos iniciando conversas para atopar calquera outra alternativa. Ofreceríanse todas as facilidades que foran posibles para que as entidades interesadas se quedaran aquí. Para Campo Lameiro é fundamental non quedar sen un banco porque pode danar á súa economía. Temos iniciadas conversas con outros alcaldes afectados, como o de Poio, o de Cerdedo-Cotobade, a de Marín e a de Forcarei. e queremos falar tamén co de Pontevedra"

"Llevábamos más de 20 años trabajando con esta sucursal" 

María Quintas, CEO de Quival S. A añade que "sentimos que es algo importante para Campo Lameiro, un lugar en donde nuestra empresa está implantada desde los años 80. Por lo menos, llevamos 20 años trabajando con esta sucursal bancaria. Nuestro grupo contaba con esta oficina en sus operaciones del día a día y nos venía muy bien esta proximidad, por lo que, es un contratiempo, y, al mismo tiempo, un disgusto, por ver como una decisión de este tipo causará sus efectos en todo un pueblo y en su tejido empresarial".

"O banco é como un emblema dun pobo, perdelo é perder entidade" 

Gemma López, taxista entiende el cierre de la sucursal como una pérdida de identidad "os veciños dinme que así vou facer máis carreiras, ou máis quilómetros en cada viaxe, pero nin gañando eu máis cartos querería que pechara Abanca. O banco é un emblema dun pobo, un servizo, perdelo será como perder a entidade e afectaralle moito a todos, así que non estou dacordo co peche. O que máis me entristece é que serán os nosos maiores os que terán que facer fronte a un gasto máis elevado xa que terán que percorrer máis quilómetros para cobrar as súas pensións".

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