La parroquia de Forzáns, en Ponte Caldelas, registró este mediodía el primer incendio forestal del año, que, gracias a la actuación vecinal y del Concello, se sofocó en poco tiempo. Sucedió en el lugar de Portorrío y fue un joven, alumno del IES de Ponte Caldelas que acababa de bajar del autobús escolar, el que divisó en el monte próximo a la parada la humareda que delataba se estaba produciendo un incendio en una zona de monte arbolado en la que, además acababan de realizar una tala forestal.
El aviso del joven permitió que la alerta al 112 llegase de modo temprano, a las 14.45 horas, aproximadamente, pero la primera respuesta la dieron los vecinos más próximos, que trataron con sus medios de atajar las llamas, al ver que la espera podría poner en riesgo la situación de varias viviendas y que por momentos había rachas de viento fuertes. El Concello de Ponte Caldelas, a su vez envió la motobomba municipal en cuanto fue requerido. El propio alcalde, Andrés Díaz, se presentó también en el lugar del fuego.
En el lugar de los hechos se dieron cita, además de los vecinos, agentes forestales miembros de la Guardia Civil y operarios municipales que colaboraron en las tareas y refrescaron la zona con el agua de la motobomba municipal. Se cree que el origen del fuego pudo estar en una quema de rastrojos que se reavivó por el viento y las condiciones de sol de la jornada de este viernes.
En el monte, indican fuentes locales, vuelve a haber condiciones propiciatorias para estos episodios durante el día, al sumarse ya una semana entera sin precipitaciones.
