La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra acogió en la mañana de este lunes la primera sesión del juicio contra Miguel Ángel G.M., acusado de matar a un vecino suyo por haberse quejado de los ruidos que hacía en su domicilio, ubicado en Mondariz.
El investigado reconoció los hechos en su primera intervención en Pontevedra ante el tribunal popular, si bien posteriormente se acogió a su derecho a no declarar a las partes.
Se le atribuye un salvaje asesinato tras asestar más de 80 puñaladas a la víctima. El fiscal pide 17 años de cárcel por los hechos al estimar la atenuante de alteración psíquica en su calificación.
La vista oral será más rápida de lo previsto ante la confesión, si bien la Audiencia pontevedresa tiene reservado el Salón Noble para el resto de la semana.
