El temporal de viento y lluvia que mantiene a buena parte de Galicia en alerta naranja ha dejado este martes vientos por encima de los 100 kilómetros por hora en distintas localidades gallegas y lluvias que han rozado (y superado en algún caso) los 100 litros por metro cuadrado.
Beatriz es la culpable. Así se llama la borrasca localizada en el Atlántico norte que trae ráfagas por encima de los 120 kilómetros por hora y acumulaciones de agua de más de 15 litros por metro cuadrado en un hora.
En la provincia de Pontevedra, Cabo Udra ha registrado las rachas más fuertes, con 119 kilómetros por hora.
INCIDENCIAS. El temporal deja casi 146 incidencias en Galicia, muchas de ellas por la caída de árboles, piedras o contenedores sobre carreteras y calles de toda la comunidad.
Hasta las 18.00 horas, el 112 registró 71 incidencias en A Coruña, 39 en Pontevedra, 22 en Lugo y 13 en Ourense. La capital gallega fue una de las localidades más afectadas, con 10 avisos, entre los que se incluye la caída de un árbol sobre varios coches en el campus sur. En Pontevedra destacan Vilagarcía de Arousa con 5 incidencias, A Estrada con 4 y Vigo con 3, mientras que en Lugo hubo 9.
Concretamente en Vilagarcía, efectivos de Protección Civil han tenido que actuar tras el desprendimiento de losetas en un edificio de la Calle Eduardo Pondal. Vilagarcía.
Por su parte, en Poio, la Policía Local informó de que el temporal provocó la caída de un árbol encima de un tendido eléctrico en O Pereiro. Las intensas lluvias generaron bolsas de agua en las carreteras y provocaron la inundación de un bar.
Según recoge en su página web Meteogalicia, la Comunidad tendrá todavía cielos nublados con chubascos durante la mañana que desaparecerán por la tarde, ya que se irán abriendo grandes claros. En lo referente a los vientos, soplarán de componente oeste y girarán hacia el sur al final del día.
De igual modo, el Gobierno gallego recomienda no atravesar zonas inundadas, no aparcar en los márgenes de los ríos, no utilizar vehículos ligeros y de poca estabilidad -bicicletas o ciclomotores- y retirar todos los objetos que puedan caer de tejados, balcones y ventanas a la calle.
Además, la Consellería do Mar aconseja la suspensión de actividades pesqueras y marisqueras en las zonas más peligrosas como medida preventiva, así como cualquier actividad en el mar que se revisen los cabos y amarres de las embarcaciones.