Aunque en el PSdeG de Pontevedra han hecho un esfuerzo por dar normalidad a la dimisión de Andrés Díaz de su cargo como número dos del órgano provincial, el portazo del socialista de Ponte Caldelas ha resonado hasta en la última esquina de la casa socialista, como parece que deseó su autor en el momento de realizarlo.
Con este abandono, tras apenas cuatro semanas en el cargo, Díaz se coló de nuevo inesperadamente en los titulares autonómicos, como hiciera con los incendios en octubre, al censurar la actuación de la Xunta; como hizo con el debate sobre el trasvase, al convocar la primera manifestación contra esta actuación, y como también hizo en los últimos meses al postularse para secretario provincial primero con una candidatura ratificada por más de 580 avales, y posteriormente, al unir fuerzas con David Regades, dando la espalda a su confluencia natural, integrada por Reguera, más afin a Gonzalo Caballero y a Pedro Sánchez.
El de Ponte Caldelas se sumó al equipo ganador con la unificación de sensibilidades como principal bandera, pero sin tener en cuenta que la brecha abierta entre su postura y el Gobierno de Vigo por el trasvase podía tomar dimensiones insalvables. Sin embargo, quienes están observando este proceso señalan su extrañeza ante el momento elegido por Díaz para dimitir si atendemos a la defensa del Verdugo como única causa. El enfado más que patente del Concello de Vigo con respecto a la decisión de la Xunta de anular la urgencia y supeditar el trasvase a un acuerdo de todas las partes se interpretó como una prueba de que esa captación no se materializará, al menos, en este mandato, dado que los tiempos de la tramitación ordinaria podrían eternizarse.
"A primeira batalla está gañada", dijo en aquel momento Andrés Díaz, triunfal. Entonces, ¿qué otras causas cimentarían el abandono de un cargo por el que el secretario de Organización saliente ha trabajado muy activamente en los últimos meses?
"Nadie quiere ser secretario de Organización si el cargo está vacío de atribuciones", señaló este jueves una fuente socialista. El alcalde vio como el equipo de Regades le premiaba con el número dos, pero es cierto que en el congreso provincial se crearon dos vicesecretarías, una para la exsenadora y exalcaldesa de Silleda Paula Fernández y otra para el diputado Luis Piña, al cargo de la dinamización de las agrupaciones locales. Además, existe un borrador que contiene alguna modificación estatutaria en ese sentido, aunque todavía está pendiente de ratificar.
"No había sintonía", manifestó otro socialista, en este caso, para referirse al propio trabajo en la organización.
Si las relaciones internas eran tensas o no, no se puede averiguar a simple vista. Hace apenas unos días el propio secretario provincial y la presidenta de la Deputación acudían a una inauguración con Díaz en Regodobargo en la que abundaron las sonrisas. El alcalde no aparece, sin embargo, en las fotos de varias de las ejecutivas locales muy recientes. Muchas de ellas se celebraron en la comarca de Pontevedra, su territorio natural, y en algunas sí aparecía Paula Fernández.
¿Era el de Díaz un puesto de cara a la galería? ¿Encontró barreras en su trabajo? Eso es algo que solo él puede desvelar, aunque, de momento, no parece entrar en su silencio, programado para centrar el foco en su trabajo como alcalde, algo en lo que tiene respaldo explicitado ayer por el secretario autonómico, Gonzalo Caballero.
Su autonomía como regidor, y el deseo de pasar página y olvidar el capítulo cuanto antes, parecen lo único que tienen en común las dos partes de este conflicto.
El sucesor del caldelano podría ser designado en la ejecutiva del lunes
La dimisión de Díaz debe ser aceptada por la ejecutiva provincial, y la reunión de este órgano podría ser el momento para la elección del sustituto o sustituta del alcalde de Ponte Caldelas. Se da la casualidad de que Vilaboa acogerá el lunes la segunda reunión de esta ejecutiva, de modo que el dilema de la dimisión podría recibir carpetazo en esta cita. Los dos vicesecretarios, Paula Fernández y Luis Piña, son los que suenan como principales candidatos al puesto, aunque también podría ser elegida una figura de consenso que rompa con la predominancia de la corriente viguesa en el órgano provincial, como Manuel Vázquez, exalcalde de A Illa de Arousa, que ha sonado con fuerza en las últimas horas.
Paula Fernández: Exalcaldesa de Silleda, exsenadora, asesora provincial, incansable en el trabajo..., la vicesecretaria también es una "mujer fuerte" de Regades.
Manuel Vázquez: Fue alcalde de AIlla, procede de una comarca en la que el PSdeG tiene un peso muy pronunciado y es bien visto por todos los sectores.
Luis Piña: Acaba de estrenarse como vicesecretario, elegido por el propio Regades, y está al cargo de la dinamización de las agrupaciones municipales.
