El PP le ha dado la vuelta al marcador en la provincia, pero con un resultado agridulce. Los populares han recuperado el tercer diputado que el PSOE le había arrebatado en abril. Y hoy tienen un senador más que en las últimas generales. Empate a escaños entre ambas fuerzas en las Cámaras Alta y Baja. Pero si en las otras tres provincias gallegas el Partido Popular fue ayer primero en número de votos, Pontevedra volvió a ser la excepción. Aquí el PSOE superó en sufragios a la principal formación de la derecha y la explicación vuelve a estar en Vigo y en el tirón de Abel Caballero.
Cierto que los socialistas pierden den casi 5.000 votos en la ciudad olívica y los populares recuperan cerca de cuatro mil y suben cuatro puntos porcentuales. Pero el PP se queda todavía a 24.000 papeletas del PSOE en Vigo, y esto marca para la derecha la diferencia entre ser primeros o segundos en la provincia, donde los populares socialistas se sitúan sólo a 14.000 apoyos de los socialistas.
Más allá de esta lectura, en la provincia el BNG mejora su resultado y asciende dos puntos y seis mil votos respecto al reciente 28 de abril, pero su cabeza de lista, Carme da Silva, se queda todavía a más de once mil sufragios del ansiado escaño. Los nacionalistas endulzan su nuevo intento fallido en la provincia con el escaño en A Coruña, que les permite regresar a un Parlamento en el que llegaron a contar con tres asientos.
La otra cara de la moneda es Vox, que araña el resultado de los nacionalistas en Pontevedra, con apenas 1.200 papeletas de diferencia, y mejora en diez mil su último resultado. Si al BNG le faltaron algo más de once mil votos para obtener su escaño, la ultraderecha lo habría conseguido con apenas 13.000 más. La otra cara de la moneda, como en el resto de España, se la queda en exclusiva Ciudadanos. La caída de los naranjas es espectacular.
La formación de Rivera se desplomó más de seis puntos porcentuales y se dejó en el camino desde abril hasta ayer nada más y nada menos que cuarenta mil votos. Pasa a ser la sexta fuerza tras el sorpasso al que le ha sometido Vox, que desde este domingo le saca catorce mil sufragios en Pontevedra.
La nueva formación de Errejón, con algún que otro ascendiente en la provincia, irrumpe en la escena política con un éxito muy relativo. Este domingo fueron poco más de diez mil personas las que decidieron apoyar a Más País y no alcanzó siquiera el 2% de los votos emitidos. Lo que sí funcionó mejor de lo esperado fue la participación de los electores. Pese a que se había pronosticado un retroceso, la provincia pontevedresa arrastró a las urnas a un 3,14% más de votantes que hace siete meses, casi dos puntos por encima de la subida que experimentó España, pero por debajo del dato gallego, donde este domingo emitieron su opinión un 4,61% más personas que en abril.
Unidas Podemos se mantiene como tercer partido más votado en la capital y BNG y Vox, al igual que en la provincia, logran mejorar sus resultados considerablemente.
