El tesorero migueliano relata que Rosendo le dijo que "condenaba al infierno" a su mujer al casarse

En su testimonio, relata haber sufrido insultos y agresiones hasta que en 2015 abandonó la orden tras enterarse de que su esposa sufría abusos 

Miguel Rosendo. SALVADOR SAS
photo_camera Miguel Rosendo. SALVADOR SAS

M.C., que ostentó el cargo de "tesorero" dentro de la Orden y Mandato de San Miguel Arcángel, ha testificado en la tarde de este martes que el líder, Miguel Rosendo, le aseguró que su mujer "estaba destinada a ser monja" y que él, al casarse con ella, la estaba "condenando al infierno". En la sesión número 13 del juicio conocido como de los Miguelianos, M.C., actual marido de una de las víctimas y a la vez acusada en la causa, ha declarado después de que una testigo que estaba citada no hubiese podido hacerlo, ya que ha dicho sufrir "dolores de un "cólico nefrítico" y ha tenido que ser trasladada a urgencias. 

A preguntas del Ministerio Fiscal y de la acusación particular, M.C. ha declarado que le "consultaba todo" a Rosendo y que éste le dijo que era "una buena opción" que estudiara Administración y Dirección de Empresas, ya que "no le daba la nota para Medicina". Más tarde, en 2009, el líder de la Orden le "designa" como tesorero "por sus estudios".

El que fuera tesorero ha manifestado que "entró en contacto" con el líder de los Miguelianos en el año 1993 "a través de" la que después fue su esposa. Según su testimonio, acudió a la "consulta" de Rosendo para que le hiciera "predicciones del futuro" y, entre otras cosas, este le recomendó que dejase de practicar balonmano porque "veía una lesión muy grave que le dejaría en silla de ruedas en el futuro". 

"Al principio, todo eran temas esotéricos y espirituales, hablaba mucho de los chacras; pero después ya se fue volviendo algo más religioso", ha sostenido. El testigo ha afirmado que Rosendo reclamaba su condición de "padre" y que "al final es la Iglesia la que pide que nos conformemos como asociación pública de fieles". 

En su testifical, M.C. ha relatado insultos, vejaciones, agresiones y situaciones de aislamiento que vivió hasta el año 2015, cuando decidió abandonar la Orden al "enterarse por su mujer" de que ésta había sido víctima de abusos por parte de Rosendo. 

El testigo ha explicado que su esposa le llamaba muchas veces "para preguntarle si podía ir a casa a comer" cuando él estaba haciendo labores de "comercial" para la Orden. "Yo no sabía que era en ese momento cuando se producían los 'trabajiños", ha dicho en referencia a los abusos. 

Por otra parte, M.C. ha testificado que cuando se enteró de los abusos "llamó al padre I.O." para avisarlo porque sabía que "apoyaba a ciegas" a Rosendo y que le "financiaba económicamente". 

El juicio de los Miguelianos se reanudará este miércoles en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra. 
 

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