5 claves para hacer un TFG de calidad

Una estudiante utiliza su ordenador portátil. EUROPA PRESS
photo_camera Una estudiante utiliza su ordenador portátil. EUROPA PRESS

La realización del Trabajo Final de Grado (TFG) marca el cierre de tu carrera universitaria y el inicio de tu futuro laboral o nuevos peldaños académicos. Por lo tanto, su realización demanda dedicación y esmero para lograr un resultado de calidad. Siendo así, y dada su importancia, muchos estudiantes pueden verse preocupados cuando llega el momento de elaborarlo.

Sin embargo, en este artículo abordaremos 5 claves esenciales que te permitirán hacer el TFG sin morir en el intento. Presta atención a los consejos de verdaderos especialistas en hacer un trabajo fin de grado para ayudarte a lograrlo.

Selecciona un tema que realmente te guste

Parece un asunto tácito, pero la realidad es que muchos estudiantes trabajan en TFG que no son de su agrado. Esto es un grave error. Lo primero que necesitas para “enamorarte” de tu trabajo final es elegir un tema que te guste y apasione. Si no logras seleccionar un tema por tu cuenta, recuerda que la universidad proporcionará una lista de posibles investigaciones que podrían interesarte.

Siguiendo esta línea, no debes olvidar que elegir el tema del TFG es crucial, por lo que, más allá de tus gustos, debes estar seguro que admite una investigación realista y relevante para los temas de tu carrera universitaria.

Elabora un cronograma de actividades

Organizarse bien puede ser la diferencia entre un TFG exitoso y un completo desastre académico. Antes de iniciar la redacción de tu trabajo, se recomienda tomarse un par de días para elaborar una planificación rigurosa que contemple los avances de la investigación, las tutorías con el tutor asignado, la redacción de capítulos, recolección de información, e inclusive tus horas de descanso y asueto. No todo se puede reducir al TFG, debes cuidar tu salud física y mental para lograr el éxito deseado.

Busca información relevante

Las fuentes de información son las bases sobre las que se sustenta cualquier TFG. Esto quiere decir que debes asegurarte de utilizar contenido de calidad, verificado y preferiblemente avalado por alguna organización o institución con buena reputación dentro del campo académico de tu área de estudios. Además, no olvides que lo ideal es incluir citas bibliográficas no superiores a los 10 años de antigüedad, salvo excepciones de los autores clásicos.

Construye tus propias ideas y opiniones

El TFG es la investigación crucial en la que se ponen a prueba tus capacidades, habilidades y conocimientos dentro del área de estudios que elegiste. Por esta razón, más allá de colocar citas relevantes o hacer alusión a teorías famosas, se espera del estudiante que sea capaz de aportar su propio punto de vista, haciendo uso de tecnicismos propios de su carrera universitaria y planteando ideas originales que logren enriquecer su investigación.

Asume las correcciones y cambios

El tutor asignado a tu TFG es el mejor aliado durante todo el proceso de elaboración del mismo. En líneas generales, será un experto en tu área de estudios, poseedor de una visión amplia y criterio técnico para aportar a tu trabajo. Por tanto, presta atención a sus correcciones y considera con cuidado los cambios que sugiere a tu investigación. Por supuesto, no dejes de lado tu visión y enfoque personal. Nunca debes permitir que el tema de tu TFG pierda la esencia inicial o se desvirtúe la idea principal.