¿No te funciona correctamente la batería de tu portátil? Prueba con estos consejos

batería ordenador

¿Has cargado la batería de tu portátil y, al poco tiempo, aparece agotada? ¿El portátil tiene conectado el cargador, pero no está funcionando? Tranquilo, son situaciones a las que todos, tarde o temprano, hemos tenido que enfrentarnos.

Debemos de ser conscientes de que, la batería de nuestro portátil, no durará para siempre. Es un componente que va mermando su efectividad y funcionalidad conforme pasa el tiempo. Cada batería está dotada de un número determinado de ciclos de carga, los cuáles van agotándose. De hecho, se recomienda sustituir la batería una vez se haya alcanzado el máximo número de ciclos de carga.

Por lo general, la vida útil de la batería se sitúa en torno al año y medio desde que adquirimos nuestro portátil. A partir de ese momento, podemos empezar a notar ciertos síntomas de desgaste, en cuyo caso habríamos de plantearnos la sustitución de la batería. En este sentido, si buscas los mejores repuestos y componentes para tu portátil, no dejes de visitar la web JVS Informática, tienda online especializada en ofrecer los productos más adecuados en base a tus necesidades, entre los que se encuentran, como no podía ser de otra manera, las baterías para portátiles.

Antes de echarnos las manos a la cabeza y concluir que, la batería de nuestro portátil, está dando sus últimos coletazos, haremos una serie de comprobaciones que nos ayudarán a determinar dónde está el origen del problema y si tiene solución.

Al tratarse de un dispositivo tecnológico, si no nos sentimos seguros acerca de cómo actuar, la mejor opción pasa por acudir a los profesionales, quienes no solo identificarán el problema, sino que te ofrecerán la mejor solución. No obstante, nosotros mismos, a través de los siguientes consejos, podemos hacer sencillas comprobaciones y averiguar por qué nuestra batería no funciona correctamente.

Realiza una calibración de la batería

Se trata del primer paso ante problemas en el funcionamiento de la batería. En ocasiones, el sistema operativo de nuestro portátil puede mostrarnos un nivel de batería que no se corresponde con la que realmente tiene el portátil.

En estos casos, el portátil puede apagarse, porque realmente se ha agotado la batería, aunque la información que nos proporcionaba nuestro sistema operativo era que teníamos más que suficiente carga. Una manera de resolver este problema es mediante la calibración de la batería.

En primer lugar, realizaremos una carga completa de nuestro portátil mientras este está apagado. De esta manera estaremos seguros de que, al encenderlo, hemos arrancado con la batería completamente cargada.

Tras esto, nos dirigimos a las opciones de energía de nuestro dispositivo para cambiar la configuración del plan en "Equilibrado". Además de esto, se recomienda realizar otras modificaciones que favorecerán la duración de la batería. Entre ellas cabe destacar:

  • Configuración de la pantalla para que no se apague nunca
  • En opciones avanzadas, debemos cambiar el parámetro "Acción de batería baja" y clicar en "No hacer nada".
  • En ese mismo apartado, nos dirigimos a "Acción de nivel crítico de batería" y seleccionamos "Hibernar".

Una vez realizadas todas estas configuraciones que, como veis, son de lo más sencillas y rápidas, consumiremos toda la batería. Aprovecha para ver una película, una serie… para que se agote más rápido. Gracias a las configuraciones que hemos establecido previamente, una vez nuestro portátil alcance el 10% de la batería, se pondrá en modo "Hibernar".

Agotada la batería, volvemos a cargarla al 100% para completar la calibración. Este método favorece que el sistema operativo no nos informe erróneamente acerca de la batería que le queda a nuestro portátil.

Revisa el adaptador de corriente y el cargador

En ocasiones, muchas soluciones las encontramos en los aspectos más ordinarios. Para revisar que no es el cargador el que está causando problemas, es tan sencillo como:

  • Comprobar que el LED de actividad se enciende cuando lo conectamos
  • Asegurarnos de que el adaptador de corriente proporciona la energía necesaria a nuestro portátil
  • Certificar que las diferentes conexiones del adaptador están bien hechas, incluida la que está conectada directamente al portátil
  • Prueba con otro adaptador compatible si tienes uno a mano en casa

Si pudiéramos, también sería interesante hacernos con un voltímetro para comprobar que la intensidad del voltaje es la adecuada. Esta medida viene especificada en el propio cargador.

Comprueba las actualizaciones y los drivers

Si nos hemos cerciorado de que, la fuente de alimentación de nuestro portátil, no es el problema, pasamos a contemplar otros escenarios como las actualizaciones o los drivers.

En el caso de estos últimos, procederemos a desinstalar los drivers correspondientes del sistema operativo. Para ello, nos dirigiremos a la pestaña "Administrador de dispositivos", donde nos encontraremos el apartado correspondiente a las "Baterías". Ampliamos la opción y nos aparecerán diferentes opciones. Desinstalaremos tanto los drivers como las baterías "compatibles con ACPI".

De esta manera, conseguimos que el sistema operativo detecte nuevas baterías y podamos reinstalar drivers limpios, que en ocasiones se dañan a causa de las actualizaciones del sistema.

Tras esto, apagamos el portátil y dejamos que su batería se cargue al 100%.  Una vez completada la carga, encendemos y, de forma automática, el portátil reinstalará los drivers. Tal y como habremos hecho al calibrar la batería, dejamos que esta se agote por completo y la volvemos a cargar al 100%.

Si persisten los problemas, podemos estar casi seguros de que la batería está dañada, por lo que habremos de sustituirla por una nueva.

Carga tu batería siempre al 100%

No olvides este consejo. Es uno de los más útiles para evitar que los ciclos de batería se agoten con mayor rapidez, mermando su rendimiento. Las pequeñas y continuas cargas provocan el desajuste de las cuentas de cargas completas que restan a tu batería. Por ello, permite que tu portátil permanezca enchufado hasta que la batería se cargue por completo.

Algunos fabricantes recomiendas que, al menos una vez al mes, dejemos que la batería llegue a niveles de menos del 10% para, después, realizar una carga duradera, de al menos 12 horas. Aseguran que es una forma eficiente de optimizar la vida útil de las baterías.

Para finalizar, evita que la batería se descargue al 100%. Tal situación, reduce la capacidad de carga máxima de la batería, convirtiéndose en uno de los motivos más comunes por los que las baterías pierden efectividad.