Herramientas de inversión avanzadas: ¿Qué es un CFD y cómo funciona?

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En el mundo de las inversiones, existen diversas herramientas que permiten a los inversores aprovechar las oportunidades del mercado y obtener beneficios. Una de estas es el contrato por diferencia, más conocido como CFD.

El concepto básico de los CFD

Dicho de manera sencilla, el CFD es un contrato entre un inversor y un bróker que permite especular sobre el movimiento de precios de un activo subyacente, como acciones, índices, materias primas o divisas, sin poseer realmente ese activo. 

Es una inversión que se basa en una predicción que permite a los inversores obtener beneficios tanto en mercados alcistas como bajistas. Para poder tener éxito es necesario contar con un gran conocimiento del mercado, gestionar el riesgo y estar permanentemente al día con las noticias económicas del mundo.

Cómo funciona el trading con CFD

En primer lugar, el trader elige el activo en el que desea operar y decide si cree que su precio subirá o bajará. Si cree que el precio subirá, abrirá una posición de compra (también conocida como "ir en largo"), y si cree que el precio bajará, abrirá una posición de venta (también conocida como "ir en corto"). 

Una vez que se ha abierto una posición, el trader puede monitorear el movimiento del precio en tiempo real y cerrar la posición en el momento que considere oportuno. La ganancia o pérdida se determina por la diferencia entre el precio de apertura y el precio de cierre de la posición. 

Al operar con CFDs, el inversor solo necesita depositar un porcentaje del valor total de la posición, conocido como margen. Significa que se puede obtener una exposición mayor al mercado con una inversión inicial más pequeña. 

Esto se llama apalancamiento, permite aumentar las ganancias potenciales, pero también amplificar las pérdidas. Es decir, conlleva grandes riesgos. Por ese motivo, los CFDs se consideran una herramienta reservada para traders avanzados.

Riesgos y precauciones al operar con CFD

Aunque los contratos por diferencia pueden ser una herramienta poderosa para obtener beneficios en los mercados financieros, también conllevan ciertos riesgos que los inversores deben tener en cuenta. 

Como decíamos, uno de los principales riesgos es el apalancamiento, ya que una mala predicción del mercado puede llevar a pérdidas múltiples. Es importante establecer límites de pérdida y tener una estrategia clara para gestionar el riesgo.

Los CFDs son productos complejos y por ese motivo no son adecuados para todos los inversores. Antes de comenzar a operar con los mismos, es recomendable obtener asesoramiento financiero independiente y comprender completamente cómo funcionan estos instrumentos.