Las nuevas tecnologías que están cambiando la conducción

Cuando pensamos en los avances más punteros a nivel tecnológico, es habitual echarnos la mano al bolsillo y sacar el teléfono mientras pensamos en uno móvil de los 90. Desde luego, son el más claro ejemplo de cómo ha progresado la tecnología en las últimas décadas, pero hay otros muchos campos en los que todos estos avances han dejado también una importante huella. De hecho, solo tenemos que mirar a la automoción.

De los tradicionales coches con motor de combustión a los nuevos coches eléctricos, o a los nuevos automóviles interconectados e inteligentes. Los últimos avances están consiguiendo incluso dar vida a la conducción autónoma, a esa en la que el conductor no es el que está al volante, sino la inteligencia artificial del propio coche. Las nuevas tendencias en tecnología para el motor van por estos derroteros, y hemos recopilado los avances que van a marcar los próximos años para el motor.

Los 4 grandes avances tecnológicos que llegan ya a los coches

A día de hoy ya se empieza a hablar de vehículos conectados. Automóviles que, gracias al IoT y a las nuevas tecnologías, son capaces de conectarse a internet e informar al conductor de cualquier cosa, o incluso de conducir por él si lo desea. Todavía queda mucho camino por recorrer, pero hay unas metas muy claras de cara a la experiencia del conductor y de sus pasajeros.

¿Cuáles son los avances tecnológicos que más fuerte van a pegar en el automovilismo? Hemos visto los casos más cercanos y las soluciones más impactantes, y todo dibuja un panorama que va a revolucionar por completo la conducción tal y como la conocemos. No solo la va a volver más sencilla, sino también mucho más segura y eficiente. Y eso, desde luego, es algo a recibir con los brazos abiertos.

La Realidad Aumentada

La realidad aumentada, AR o RA, es una tecnología que siempre se ha trasladado al plano lúdico por su enorme potencial a la hora de convertir el mundo que nos rodea. Sin embargo, ya se están estudiando prototipos de automóviles que saquen partido de ella para facilitar y volver más segura la conducción.

Sin ir más lejos, a través de la luna frontal y utilizando sistemas de cámaras, sensores e infrarrojos, se está estudiando ya la posibilidad de que, a través del GPS, el conductor vea cómo en la carretera se "proyecta" una flecha que marque el camino a seguir para llegar a su destino. También podría servir para que vea avisos sobre accidentes o recordatorios de señales. Todo ello, en la luna, como si esta actuará como una ventana a otro mundo sobre el real.

Neumáticos hechos con botellas

Aunque parezca que no, el neumático también es un elemento en constante evolución. De hecho, en los últimos años se están consiguiendo unos avances realmente palpables. Sin ir más lejos, ya se está empezando a preparar las primeras pruebas en entornos urbanos y reales con neumáticos sin cámaras de aire.

Pero el paso más importante, sobre todo de cara a la sostenibilidad, es el de los neumáticos hechos en PET, el material de las tradicionales botellas. Ya hay marcas que han demostrado que es posible y están empezando a movilizarse para proceder con su fabricación en masa y distribución de cara a 2023. Es el siguiente gran paso para ayudar a proteger el planeta.

Eliminación de retrovisores

Es un plan a largo plazo, pero la tecnología está avanzando en esa dirección a un ritmo cada vez más elevado. El diseño y evolución de los sensores de proximidad y las cámaras permitirá eliminar el uso de retrovisores con espejos en los automóviles. Ya se están probando soluciones capaces de detectar diferentes tipos de objetos que, en función de su cercanía, avisen al conductor de cualquier acercamiento.

Además, las cámaras ayudarían a dar la información también sin tener que desviar la mirada de la carretera. Quedan años, pero es el objetivo a alcanzar.

Monitorización del conductor

La fatiga o la falta de concentración pueden ser razones más que suficientes para provocar un accidente. Por eso, se están desarrollando soluciones que monitoricen el comportamiento del conductor para evitar que se den este tipo de situaciones. Cámaras capaces de detectar el ritmo de parpadeo, la expresión facial o incluso los movimientos de cabeza para detectar si hay indicios de sueño o fatiga.

Medida interesante para evitar problemas serios al volante. La falta de descanso es uno de los principales enemigos de la seguridad vial, y la tecnología quiere evitarlo por todos los medios.

Hay muchos más frentes abiertos en esta hibridación entre motor y tecnología. Muchas más ideas en camino para que los coches contaminen menos, para que sean más eficientes y para que todos los que van en su interior puedanviajar todavía más tranquilos y seguros. Conducir nunca va a ser como era.