Aunque las regulaciones y normativas varían mucho dependiendo de cada país, es posible tener una idea general de los planteamientos más comunes que han hecho los abogados respecto al tema. Si bien ciertas naciones han implementado prohibiciones, más que todo corresponden a regímenes totalitarios. La mayoría de los países libres aprueban el uso de las criptomonedas e incluso lo incentivan con diferentes mensajes promocionales en diversos medios. En caso de que alguna organización o un sector quiera reglamentar su uso, lo ideal es que la cantidad de reglas sean las mínimas necesarias. Cabe destacar que gran parte del encanto de usar criptomonedas es que están libres y no se encuentran sujetas a leyes o decretos. En todo caso, el desafío sería que las criptomonedas poseen características distintas a los demás bienes que se utilizan en la actualidad. Muchas veces las leyes clasifican un recurso antes de poder regular sobre él, pero en este caso hacer que las criptomonedas encajen en un nivel o renglón puede ser difícil. Las monedas de tipo crypto se pueden obtener de muchas formas, aparte de que uso se podría destinar para fines variados.
¿Cómo se diferencian las criptomonedas del dinero electrónico?
Es común confundir los términos y pensar que son lo mismo, cuando esa no es la realidad. Cuando se empezó a usar el dinero de forma virtual, a través de transferencias y otras operaciones financieras, no hubo ningún cambio a nivel económico. Ni tampoco cambió la forma en que empleaban los recursos, más allá de que cambiaran los dispositivos y la manera de emplear los fondos. Este es un buen momento para conocer innovaciones que tengan que ver con las monedas de tipo crypto, y para ello es útil conocer con detalle las Bitcoin Code opiniones app. Siempre es recomendable mantenerse un paso delante de los cambios que estén por venir, sobre todo a nivel económico. Siguiendo con la idea del dinero virtual, éste se diferencia de las criptomonedas, principalmente porque abarca el uso de las monedas fiduciarias o de tipo fiat, que son el dólar, el euro, el yen, entre otras. Claro está, muchos podrían argumentar que las criptomonedas también se almacenan en un entorno virtual, lo cual es cierto, pero no están alojadas en servidores que corresponden a empresas. Más bien se encuentran registradas en la blockchain, la cual es descentralizada y no pertenece a nadie.
¿Qué tienen en común las criptomonedas y el dinero virtual?
En líneas generales, ambos conceptos se adhieren a las reglas a las que ya estamos acostumbrados. Por nombrar una: si se llega un trato por la venta de un inmueble, ambas partes sabrían muy bien que hacer para concretar la transacción. La dinámica no cambia de cómo se realizaría la operación, solo que en el entorno es distinto. Se mantiene el cumplimiento de las reglas básicas que utilizamos muchos en la sociedad, al momento de intercambiar bienes por recursos. Para saber más de cómo se ha ido popularizando esta tendencia, es posible consultar el siguiente artículo. Por otro lado, es válido preguntarse cómo se cambian las criptomonedas a monedas fiduciarias y la respuesta es muy sencilla. Se establecen diferentes tasas que se pueden conseguir por internet, las cuales van cambiando a medida que pasan los días. Casi siempre van en subida, por lo que resulta provechoso contar con criptomonedas. Cabe acotar que los gobiernos no están facultados para determinar las tasas de cambio, a diferencia de lo que pasa con las monedas convencionales. En resumen, las criptomonedas han creado un fenómeno novedoso que ha tomado a algunos por sorpresa, pero los que ya lo veían venir han sabido sacarle provecho.
