Zahara: "No podía parar de llorar leyendo lo que tantas mujeres tenían que contarme"

La cantante llega este sábado al FIV de Vilalba con su gira más sincera y confesional 
undefined
photo_camera Zahara. NOEMÍ ELÍAS BASCUÑANA

Zahara (Úbeda, 1983) ha dado el paso de compartir sus cicatrices y heridas todavía abiertas en su álbum Puta, un trabajo en el que revela las agresiones machistas que sufrió desde su infancia. La honestidad que encierra el disco se eleva a su máximo exponente en los directos de la gira en los que la cantante, en un proceso catártico, desnuda un alma que refleja generosidad y valentía. En el último mes han surgido voces que la han intentado silenciar a raíz del cartel en el que anuncia sus conciertos, en el aparece vestida como una virgen, pero a Zahara, que admite vivir "en una montaña rusa emocional", aún le queda mucho que contar. 

Lanzaste Puta a finales de abril pero no fue hasta este verano cuando te reencontraste directamente con tu público. ¿Cómo te sientes al abrir de par en par tu infancia y tu pasado ante los ojos de las miles de personas?
No deja de ser extraño hacerlo. Es muy liberador. Me siento más sincera que nunca. Como si antes hubiese vivido con el miedo a decepcionar y ahora puedo coger toda mi mierda, pintarla de rojo y decir, ey, que soy así. Y me encanta. Me hace sentir tan bien que a veces acabo llorando en el escenario. Algunos días mientras canto Taylor, otras en negronis y martinis, cuando me escucho diciendo que “tengo tantos nombres escritos dentro…” me rompo. Otras veces es al acabar, cuando me quedo unos minutos más que mi equipo en el escenario y miro a quienes han venido, veo sus ojos y la emoción de ese aplauso y trato de quedármela para siempre. Siento esa gratitud y esa belleza y me emociona de una manera genuina y pura.

“He intentado esconderme, pero lo que tienes ante ti soy yo”, reza la letra de negronis y martinis. ¿Cómo ha sido el camino hasta llegar al punto de liberación que has alcanzado con la publicación de Puta?
Creo que siempre he querido mostrarme. Por eso digo “he intentado esconderme” porque sentía que a la par he estado gritando a los cuatro vientos todo lo que he vivido y a la par tan avergonzada por lo que me había pasado que deseando que nadie se diera cuenta de lo que estaba diciendo o contando en mis canciones. Observo mis primeras canciones (algunas de ellas están en el disco de rarezas Madre) y me siento ya completamente desnuda, pero con el pudor de hacerlo. Ahora no tengo esa vergüenza. Voy tranquilamente por la calle sin nada encima, con un luminoso que dice “estoy desnuda” y me siento increíble. 

"Me siento más sincera que nunca"

”Somos yonkis del cariño ajeno”, cantas en Taylor. ¿Cómo ha sido volver a los escenarios tras tantos meses tras la pandemia?
Muy fuerte. De hecho en los primerísimos había algo en mí que no se terminaba de abrir. Supongo que por algún tipo de miedo ancestral o por la propia presión a la que voluntariamente me he sometido ideando este show tan exigente. Pero hubo uno, en Madrid, en el que de repente sentí que todo estaba bien. Que ya no sentía el vacío una vez acababa el concierto, sino que al contrario, el amor que recibo ahora acompaña el que siento por mí misma. Ni yo sé describirlo bien, pero es precioso y salgo a cada concierto intentando vivir cada segundo profundamente.

Tus conciertos empiezan con un vídeo de tu infancia en el que apareces cantando rodeada de las mujeres de tu familia y finalizan con Dolores, la copla que les has dedicado. ¿Qué han significado en tu vida?
El otro día canté en Baeza, muy cerca de donde nací y justo hablaba de esto. De cómo a pesar de las cosas que me han hecho tanto daño en mi vida lo que me da paz es entender que en mitad de todo ese dolor existió también un amor genuino, un cuidado puro, un acompañamiento verdadero que a día de hoy sigue y que está representado por esas mujeres. Y mi padre, claro.

El primer single del disco, Merichane, ha desatado su particular movimiento me too al grito de “yo estaba ahí”. ¿Cómo vives la oleada de mensajes que te llegan  de mujeres a las que tu música ha animado a contar su historia?
Pues sigue emocionándome casi como el primer día. Digo casi porque los primeros días fue un impacto tan brutal que no podía parar de llorar leyendo lo que tantas y tantas mujeres tenían que contarme. Ha sido algo inesperado a lo que no termino de acostumbrarme y siento la tristeza de ver cómo sigue siendo necesario que se digan esas cosas, cómo este machismo sistémico está instalado en nuestra sociedad y cómo salir de él nos va a costar tanto.

En Berlin U5 la respuesta ante el fin del mundo es bailar. ¿Qué harías tú si el mundo se acabara mañana?
Creo que bailar también [ríe]. Lo digo en serio. Bailar, si puedo con mi hijo (que es un gran bailarín) y con las personas importantes de mi vida. Pero ojalá no se acabe.

"El amor que recibo ahora es el que siento por mí misma"

Con la palabra Puta buscas incomodar a todo el que la escuche. Sin embargo, el público de tus conciertos que luce la banda azul con la que apareces en las fotos promocionales ha tornado completamente el significado ¿Te esperabas esta respuesta?
Bueno, sinceramente, me hacía mucha ilusión pero no imaginaba que la gente lo fuera a hacer. O sea, Guille (mi socio artístico en todo esto) y yo fantaseábamos literalmente con esa idea: un ejército de personas abanderadas con el "puta" en mis conciertos, pero verlo, madre mía, verlo desde el escenario es un espectáculo. Me encanta. Es que están todas y todos tan guapos que no me lo creo.

Sobre los escenarios es palpable la complicidad que tienes con tu equipo. ¿Cómo te sientes trabajando con ellos?
Mira, es un sueño. De verdad te lo digo. Lo comento en mis post de Instagram, pero es que es cierto. Siento que vivo en un romance precioso con ellos y con ellas (porque por primera vez en la mayoría de los conciertos hay paridad en cuanto a hombres y mujeres en mi equipo). Nos cuidamos mucho entre nosotras, y nos prestamos atención, nos respetamos artística y profesionalmente. Siento que cada una de estas personas tiene su espacio para crear y sentirse bien dentro del guión que marca el show, al menos yo intento ofrecer eso. Cuando les veo trabajar, entregarse como lo hacen, siento que ahí está la respuesta. Para mí este equipo era muy importante desde el principio, porque piensa que actuando somos 5 personas, pero que al otro lado hay 7. Esto funciona porque todas estamos ahí dándolo todo, y donde cada una de ellas sabe que su papel es fundamental. Desde quien afina o coloca los instrumentos hasta quien conduce la furgoneta.

Las canciones de Puta están tan interconectadas que pueden ser entendidas como los capítulos de una novela. Dada tu faceta de escritora, ¿has pensado en algún momento en trasladar la temática del disco a un nuevo libro o poemario?
Me encanta que lo veas así porque es exactamente como yo lo concebí. Pues no lo creo… quiero decir que esto ha surgido así. Se ha creado de esta manera y ya está dicho de esta forma. Repetirme de otra no sé si tendría sentido. No lo descarto, pero la verdad es que ya tengo las ideas puestas en lo próximo y por ahora no parece que se vaya a parecer a Puta.

"Galicia no solo tiene un público maravilloso, sino que es que me encanta ir allí"

Actualmente la salud mental es un tema que está al orden del día. Tú reivindicas que si no fuera por la terapia no llegarías a ser la persona que eres hoy en día. Como sociedad, ¿consideras que estamos desestigmatizando la salud mental o que aún queda un largo camino por recorrer?
Me gustaría pensar que sí, pero la realidad es que más allá de nuestra burbuja se sigue tomando como algo de modernos o de ricos, que no va con ellos, que no es necesario, que es para “locos”. Y por eso más que nunca creo que hay que reivindicarlo desde todos los ámbitos y con todos los altavoces que podamos. Ahora se habla de ello, pero hasta en mi entorno cercano que saben mi historia y que conocen el bien que me ha hecho escucho cosas como que “estás mal porque quieres”.

Galicia tiene un hueco especial en La Puta Gira. Este sábado a las 24.00 horas tocas en el FIV de Vilalba ¿Qué te hace volver siempre a cantarnos aquí?
Galicia no solo tiene un público maravilloso, sino que es que me encanta ir allí. Su clima, su comida, sus playas, su gente… Ojalá tuviéramos más tiempo para no solo llegar al sitio, sino que pudiéramos estar tranquilamente días y disfrutar de todo eso.

Comentarios