El jurado del Premio de Literatura en Lengua Castellana Miguel de Cervantes, correspondiente a 2023, ha elegido a Luis Mateo Díez como ganador de la edición de este año. El premio está dotado con 125.000 euros y constituye el más prestigioso galardón de las letras en español.
El Cervantes galardonó el pasado año al escritor venezolano Rafael Cadenas y el anterior a la autora uruguaya Cristina Peri Rossi. Anteriormente, se premió a dos escritores españoles consecutivamente —Francisco Brines (2020) y Joan Margarit (2019)— y dos latinoamericanos —la uruguaya Ida Vitale (2018) y el nicaragüense Sergio Ramírez (2017)—, rompiendo la habitual alternancia del premio.
El palmarés de los últimos años se completa con los nombres de Eduardo Mendoza (2016), Fernando del Paso (2015), Juan Goytisolo (2014), Elena Poniatowska (2013), José Manuel Caballero Bonald (2012) y Nicanor Parra (2011), entre otros.
En 1976, Jorge Guillén, una de las máximas figuras de la Generación del 27, recibió el primero de estos galardones y, desde entonces, se han sucedido otros 42 premiados: 20 españoles y otros 22 hispanoamericanos. Únicamente en 1979 hubo dos ganadores, al concederse ex aequo a Gerardo Diego y Jorge Luis Borges.
Perfil del autor
Los mundos imaginarios del "irrealista" escritor y académico Luis Mateo Díez (Villablino, León, 1942) son herederos de una cultura oral que este narrador ha llevado a su literatura en forma de metáfora rural y que ha sido reconocida este martes con el Premio Cervantes.
Prolífico escritor, Luis Mateo Díez ha sumado el máximo galardón de las letras españolas a otros muchos reconocimientos literarios, además de ser el único autor en lengua castellana que ha obtenido en dos ocasiones el Premio Nacional de Narrativa y el premio de la Crítica gracias a sus novelas La fuente de la edad (1986) y La ruina del cielo (1999).
La imaginación, la memoria y la palabra son los elementos con los que Mateo Díez, que se define como un "escritor irrealista", crea sus ficciones, que cree que pueden permanecer ajenas a la actualidad aunque no al sentido de lo que ocurre, por lo que a lo largo de su vida literaria se ha dedicado a crear mundos imaginarios.
Espacios oníricos y de ensoñación han sido escenarios habituales en las novelas de Mateo Díez, creador de "ciudades de sombra" como su mítica Celama, el territorio simbólico y metafórico imaginado por él para retratar la extinción del mundo rural.
Un territorio que fue el escenario de tres novelas, El espíritu del páramo (1996), La ruina del cielo y El oscurecer (2002), con la que cerró la trilogía llamada El reino de Celama.
El territorio de Celama es, para este autor, "una geografía real, entre lo soñado y las sugerencia de lo que podría ser un pueblo de Castilla y León, de León, un territorio muy europeo" y en el que transcurrió su infancia.
En 2022 el flamante premio Cervantes regresó a su reino imaginario en su última obra Celama (un recuento), un libro compuesto por 38 historias que transcurren en ese territorio y, aunque la mayoría forman parte de la trilogía, otras son inéditas.
También el arte de narrar, la imaginación y la memoria fueron tema del discurso con el que tomó posesión del sillón I de la Real Academia Española y que ocupa desde 2001