"Nacimos ya con los haters bajo el brazo; pero callamos bocas"

Taburete vuelve al ruedo y presentará en el Auditorio Mar de Vigo las nuevas canciones de su quinto disco, Matadero 5, con un repaso por toda su trayectoria musical
Antón Carreño y Guillermo Bárcenas.
photo_camera Antón Carreño y Guillermo Bárcenas.

Nacieron ya con la polémica a cuestas por ser hijo del extesorero del PP Luis Bárcenas y nieto del empresario Gerardo Díaz Ferrán, pero Guillermo Willy Bárcenas y Antón Carreño han conseguido callar bocas a quienes asociaban su boom a un apellido. Haciendo oídos sordos, Taburete siguió en sus trece de triunfar y ya van por el quinto disco, Matadero 5, que saldrá el 12 de septiembre pero del que se podrán escuchar algunas de sus canciones mañana en Vigo.

Acaba de ver la luz Penúltimo beso, otra canción del nuevo disco. ¿Dé que va?

Está escrita un día o dos antes de que mi madre entrase a la cárcel. La anterior canción de ‘Mamá’ era más una carta a ella, y esta va de cómo me sentí en ese momento.

También han sacado Roto y elegante, que ha sido todo un éxito.

Es una canción muy bonita. La gente se la lleva mucho a su terreno y se entiende muy bien, que normalmente nuestras canciones no se entienden tan claras (Ríe). Ya suena a un clásico entre la gente, que se la canta de principio a final. Como la hemos tocado poco en concierto es una de las que más vivimos cuando la tocamos.

Habla de prejuicios...

Desde que empezamos nos hemos enfrentado a muchas críticas, muchos prejuicios, a muchas opiniones de gente que ni siquiera había escuchado a Taburete. Al final hemos conseguido callar a casi toda esa gente. Aunque hay personas que siempre van a seguir ahí erre que erre, la inmensa mayoría valora lo que hemos logrado, independientemente de que te guste o no Taburete. Hemos derribado muchas barreras.

Al final tener haters, en cierta medida, es bueno. Que hablen bien o mal, pero que hablen, ¿no?

Lo que pasa es que normalmente los haters llegan cuando haces cosas, cuando ya tienes éxito, pero nosotros nacimos con los haters ya debajo del brazo (Ríe).

El paso del tiempo ha servido para darle con un canto en los dientes a quienes decían que su éxito estaba asociado a su apellido...

Lo ha demostrado el público, los discos de platino que nos han dado, la nominación de los Gramys... hemos callado bocas. Gente rabiando va a haber siempre, pero nosotros nos centramos en que crezca lo bueno.

Con más de ocho años a las espaldas, ¿qué queda en los escenarios de los inicios de Taburete?

Quedamos nosotros, que somos los mismos. Somos un grupo de ocho amigos que disfrutamos viajando y haciendo todo lo que engloba el tener una banda. No tenemos discusiones, seguimos trabajando con el mismo equipo, nuestros amigos también siguen siendo los mismos del principio. Sí que pensamos más a lo grande en la música, en hacer un concierto más potente, pero la base de Taburete sigue siendo la misma.

Arranca la gira Caminito al matadero. ¿Qué se va a escuchar?

En esta primera minigira, que es la preparación a Matadero 5, la grande de verano, queríamos volver a las salas haciendo un recorrido desde el primer disco de Taburete en formato acústico, que es como nació el grupo.

¿Qué hace diferente al disco?

En este último disco nos hemos abierto a sonidos nuevos, pese a que somos un grupo con mucha influencia de la música latinoamericana, como la ranchera. Nos hemos animado con el flamenco, la cumbia, el bolero... es un disco que cuando lo escuchas del tirón te deja descolocado porque te lleva a muchos sitios y ninguna canción se parece a la anterior.

¿Habrá alguna sorpresa?

Sorpresa no, pero pistas sí. El siguiente single se llama ‘Camarón’ y tiene una colaboración que tira por lo flamenco, pero más moderno. Va a impactar mucho, es una persona muy conocida... la bomba del disco. Saldrá a finales de junio y será el último fascículo (Ríe).

También han sacado ya La discoteca, que tiene una colaboración con el Dúo Dinámico.

Es un honor contar con ellos. Miguel Campello también está en Penúltimo beso. Me encanta su voz, yo era un gran seguidor de El Bicho.

¿Es una oda a las ganas que había de fiesta ya, no?

¡Completamente! (Ríe) La hice en verano, durante la gira. El año pasado dimos 72 conciertos, y claro, cuando llevas 40 y ves al público sentado, con mascarilla... te cuesta un poco animarte. Con esta canción quería que volviese la fiesta de verdad... la destrucción. Es una canción muy de concierto, de bailar, de saltar... con esa parte de bacalao que tiene.

¿Estamos ante un nuevo Taburete?

La primera etapa de Taburete son el primer y segundo disco, que fue con el que nos hicimos famosos. Era un sonido más tranquilo, más acústico, no estaba todo tan pensado... con el tercero y el cuarto hemos crecido hasta ser la banda de rock que somos ahora, con un show más potente. Este quinto disco abre un nuevo Taburete.

¿Pensaban llegar hasta aquí?

¡Ni a esto ni a mucho menos que esto! Queríamos tener nuestro disco en Spotify, esa era nuestra ilusión. Lo grabamos, lo subimos... y a partir de ahí entró en lista de virales. Las canciones empezaron a correr entre la gente y nos llevaron hasta aquí. Fue un ascenso rápido que hubo que asimilarlo de una manera en la que todavía musicalmente no estábamos preparados pero con muchas ganas. Pero vaya... ¡que las expectatrivas estaban muy bajas! (Ríe).

Las entradas para el concierto de Vigo ya están agotadas.

Después de Madrid y Barcelona, Galicia es donde más gente ha venido a vernos y donde más veces hemos tocado. No sé como la gente no se cansa (Ríe). Siempre que vamos solemos llenar. Nuestro mánager, Pucho, tiene casa en Sanxenxo y Antón, también en Corrubedo. Además, su familia es de aquí. En verano volveremos a tocar en Betanzos y nos quedaremos a pasar unos días. Nos encanta como se come en Galicia.
 

Comentarios