OLIVER LAXE

"Los gallegos somos independientes en el alma; sigamos así y seremos eternos"

"En Galicia no invertimos mucha energía en el pensamiento político que divide", añade el director
El director de cine Oliver Laxe, durante su intervención de este martes en A Coruña. CABALAR (EFE)
photo_camera El director de cine Oliver Laxe, durante su intervención de este martes en A Coruña. CABALAR (EFE)

Es la primera vez que una película en gallego, O que arde, opta a ser la mejor en los Premios Goya y con ella su director, Oliver Laxe, deja su impronta también como gallego al reflejar en el largometraje la identidad de Galicia independientemente de la dialéctica política.

"Creo que los gallegos somos independientes en el alma, que es donde hay que buscar la libertad y la emancipación, es la independencia que vale, las otras independencias pues son cosas materialistas y superficiales; sigamos siendo así que seremos eternos", ha asegurado Laxe en la Universidad de A Coruña.

Todas sus películas de la última década han conseguido premios en los principales festivales internacionales y O que arde, nominada por la Academia de Cine como mejor película, mejor dirección, mejor fotografía y mejor actriz revelación, ha supuesto su consagración en España.

Oliver Laxe nació en París en 1982 pero se trasladó a vivir a A Coruña con seis años; estudió en la Universitat Pompeu Fabra y, tras viajar mucho, se siente profundamente gallego.

El canto a la identidad de este largometraje, en un momento convulso en España por el conflicto catalán, sirve al joven director para asegurar que en Galicia "no invertimos mucha energía en ese pensamiento político que divide", sino que la identidad de los gallegos "está ahí, es fuerte y reconocida tanto en Galicia, como España, como en el resto del mundo".

"Por lo tanto, tenemos que seguir un poco con esta actitud zen, de aceptación, no es resignación, es aceptación, es ser libres", matiza.

Estas nominaciones han proyectado mucha felicidad y eso es lo importante, porque Laxe cree que las películas tienen que servir "de espejo a la gente y subir la autoestima". Algo que "necesitamos en Galicia a veces, querernos más", reconoce.

O que arde empieza con unos eucaliptos altísimos que se van cayendo por la acción de unos bulldozer, una secuencia sobrecogedora de la que reconoce sentirse orgulloso porque es la primera que ha trabajado de manera industrial, con medios, en su carrera.

No obstante, considera "frágil y pequeña" la película, por lo que es un mérito poder competir con otros proyectos tan grandes, con tanto presupuesto y actores conocidos, sin desmerecer el trabajo de Banderas o Tosar.

"Las más nominadas son las películas más grandes, estando la de Almodóvar ahí está muy difícil la cosa para ganar premios, no sé, a ver, Benedicta tiene sus puntos", dice sobre esta lucense de 84 años y sin experiencia previa, nominada como mejor actriz revelación.

Benedicta está en una "suerte de ecuanimidad, de punto cero", muy feliz pero intentado "ponerle cortafuegos a la felicidad y a la euforia y al ego".

"Estamos todos intentando controlarnos –continúa–, nos encantaría estar ebrios de felicidad pero tenemos los pies en el suelo, pienso que es lo que tenemos los gallegos, que estamos muy enraizados, todos los días la naturaleza nos dice que somos pequeños, eso hace que cultivemos esa humildad".

Oliver Laxe ha impartido en la mañana de este martes en la Escuela de Arquitectura la conferencia Trascendiendo el paisaje, organizada por el Grado en Paisaje, el primer grado interuniversitario en Galicia entre la Universidad de A Coruña y la de Santiago de Compostela.

En Galicia es "determinante" este nuevo grado porque "no se pensó ni se sintió el paisaje, no se construyó teniendo en cuenta la escala humana". "Tenemos la posibilidad de desandar esos caminos equivocados y hacer un mundo un poco más armónico", termina.

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