"Lo que hago es regalarle mi vida a la gente, se la ofrezco en la palma de mi mano"

Dice que se fue de su país por culpa de la guerra. Y que no se plantea regresar. Después de "ejercer de vagabundo" por Europa, llegó a España y se afincó en Oropesa del Mar (Castellón). Compositor, cantante y poeta, Bosko Beuk viene este viernes por primera vez a Pontevedra para ofrecer un recital, de poesía y música, en el Edificio Castelao del Museo. 
El cantante y compositor Bosko Beuk. PEPE LORITE
photo_camera El cantante y compositor Bosko Beuk. PEPE LORITE

Canta en castellano, pero también en serbocroata y en alemán. Es Bosko Beuk (1955), un poeta y cantante nacido en la ex-Yugoslavia, que visita este viernes por primera vez Pontevedra para dar un concierto, invitado por el Ateneo, en el Edificio Castelao del Museo (20.00 horas, entrada libre).

¿Qué es lo que va a hacer en este recital de Pontevedra?
Voy a presentar mi primer libro de poemas en español, que se titula Auténtico. Además interpretaré canciones de algunos de mis últimos discos, uno que se titula como el poemario, Auténtico, y otro, Poquito de ti

Porque efectivamente, como dice, aparte de cantante, usted es poeta.
Eso es: poeta, compositor, escritor... A mí me gusta definirme como songwriter

Usted nació en la ex-Yugoslavia. ¿Cómo terminó afincándose en España?
Por cosas de la vida. Cuando empezó la guerra en Yugoslavia, yo decidí marcharme. No quería estar allí. Así que acabé buscándome la vida por Europa y ejerciendo de vagabundo. Viví en Austria unos años y luego en Holanda. Cuando pierdes tu patria, te acaba dando igual dónde vives, pero lo que nunca te da igual es cómo vives. Como yo conocía España bastante bien, finalmente decidí venir a vivir aquí. Eso fue hace doce años. Y aquí sigo. Al principio no sabía ni hablar el idioma y todavía no lo domino del todo, pero lo que creo que hago bastante bien es escribirlo. Casi sin errores. Lo escribo mucho mejor de lo que lo hablo. Y me he ido animando a publicar canciones. Tengo siete discos propios publicados. Y ahora este libro.

El país en el que yo nací ya no existe. Siento que no tengo a donde regresar. Todas las religiones y nacionalidades estaban mezcladas. Ahora te obligan a elegir. Y para mí eso no es posible

¿Cómo definiría su música? ¿Melódica, romántica, pop...?
Dicen que la canción ‘Mi madre’ podría ser un himno para las madres. Pero definir mi música, así en general, es difícil para mí. Yo lo que hago es regalarle mi vida a la gente, se la ofrezco en la palma de la mano. Toda la tristeza que arrastraba en mi vida por todo lo que dejé atrás y perdí por culpa de la guerra, la he intentado transformar en amor. Porque con amor puedes decir todo lo que quieres. Sí que he intentado ir encontrando mi propio estilo. Y creo que sí, que lo he encontrado. ¿Qué se puede decir que hago? Pop, baladas... Es música atemporal, que se puede escuchar siempre, en cualquier momento. Estoy deseando actuar en Pontevedra. Ojalá pudiese actuar dos horas seguidas, pero para ser la primera vez quizás sería demasiado (se ríe).

La situación en la ex-Yugoslavia hoy es muy diferente a la que le llevó a abandonar su país. ¿Se plantea regresar?
No, no quiero volver. ¿Sabes qué pasa? El país en el que yo nací ya no existe. Siento que no tengo a donde regresar. No me identifico con esos países nuevos. Prefiero quedarme aquí. Nunca se sabe lo que puede pasar, pero ahora estoy muy a gusto en España. Esto quizás no lo entienda mucha gente, lo sé. Pero yo vivía en un país que se llamaba Yugoslavia y en el que todos estábamos mezclados. En todas las familias había diferentes nacionalidades y religiones. Ahora tienes que elegir. Te obligan a elegir. Y para mí eso no es posible.

¿Sigue cantando en serbocroata?
Yo hablo seis idiomas y canto las canciones de mi repertorio en español, en alemán y en serbocroata.

¿Qué pensó cuando vio que este año volvía a haber otra guerra en Europa?
Intento no ver los informativos, la verdad. Porque mi experiencia, tras lo que pasó en mi país, es que no es verdad todo lo que llega aquí. Estamos demasiado lejos. No sabemos nada de lo que está pasando realmente. Quizás es muy fuerte decir que lo que nos cuentan es mentira, pero sí que creo que las noticias de una parte y de la otra están muy dirigidas.

Comentarios