La esposa del príncipe William, Kate Middleton, no sabe dónde meterse. Las burlas en el Reino Unido hacia ella no cesan desde que el museo de Wimbledon expone en sus salas una serie de documentos suyos, entre los que se encuentra una carta que demuestra que, pese a sus estudios elitistas, tiene muchas faltas de ortografía.
La misiva en cuestión, la escribió en 2008 y es una carta de agradecimiento al All England Club de Wimbledon por invitarla a disfrutar del famoso torneo de tenis. Entre los notables errores de la princesa, podemos destacar que queriendo escribir quiet (tranquilo), escribió quite (bastante). También tiene serios problemas con el uso de las abreviatura y los apóstrofes. Llega a inventarse el término 'till, que no existe con apóstrofe, para abreviar until (hasta). Además, tiene (o tenía en 2008) dificultades para utilizar las comillas tradicionales según la normativa.
Lo curioso es que ella misma supervisó y cedió los documentos, algo a lo que los comentaristas británicos (siempre despiadados) están sacando mucha punta.
