El excapitán de los All Blacks (selección de rugby de Nueva Zelanda), Jerry Collins, perdió la vida a los 34 años en un accidente de tráfico registrado en el sur Francia, concretamente a la altura de Herault en la autopista A9. También falleció su esposa, Alana Madill, mientras que su hija de tres meses está gravemente herida.
Collins, de 34 años, con 48 partidos a sus espaldas con los All Blacks, de los cuales ejerció como capitán en tres ocasiones, jugaba actualmente en el Narbonne de la Segunda División francesa.