La Federación Española de Fútbol (RFEF) ha anunciado que se han producido las vacantes por causas económicas en Segunda B, con efectos para la temporada 2017/18 del Boiro y el Gavá.
Según la circular federativa estas bajas son como consecuencia del incumplimiento en lo dispuesto en los artículos 192 del Reglamento General de la RFEF.
La notificación llega después de que el Boiro haya anunciado que queda por saldada la deuda de 94.000 euros que tenía con los jugadores y, por consiguiente de que estos retirasen su demanda.
Ambos clubes, según anunció el pasado viernes la Asociación de Futbolistas Españoles (Afe), no habían satisfecho el total de los pagos establecidos para cubrir las cantidades reclamadas por sus jugadores al término del plazo.
La RFEF precisa que la cobertura de las plazas vacantes es potestad suya, con lo que en la circular indica que la cantidad en la que deben subrogarse los clubes interesados es de 133.000 euros –la suma de la deuda de ambos cluves dividida entre dos–, que será asignada a los criterios estipulados en el artículo 194 del Reglamento General.
Primero sería para el equipo de Tercera de la misma Federación autonómica; luego para el descendido de Segunda B de la misma territorial a la que esté adscrito el club descendido por impago; el resto de conjuntos de Tercera; y el resto de descendidos de Segunda B. Estos criterios son excluyentes.
En lo que compete a la categoría gallega y el descenso administrativo del Boiro las prioridades para comprar su plaza sería se establecen en el sguiente orden de preferencia: Cerceda, Bergantiños, Racing Vilalbés, Arousa, Compostela, Vilalonga, Silva, Choco, Barbadás, Negreira, Barco, Alondras, Ribadumia, Céltiga, Cultural Areas, Noia, Ourense CF, Laracha, Arenteiro y Somozas.
