El juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge ha acordado este viernes que el ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales no pueda comunicarse con la jugadora de la selección española de fútbol Jenni Hermoso y le prohíbe acercarse a ella a menos de 200 metros.
En un auto emitido tras la declaración como investigado de Rubiales el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 sigue así en parte el criterio de la teniente fiscal, Marta Durántez, pero rechaza las comparecencias ante el juzgado quincenales, y la solicitud de la acusación particular de embargar los bienes del ex presidente.
Según fuentes fiscales, Rubiales ha negado ante el juez que se dieran coacciones hacia la jugadora de la absoluta y su entorno, así como la falta de consentimiento en el beso que le propinó en la entrega de trofeos del Mundial en Sidney (Australia).
El ex presidente de la Federación ha contestado a las preguntas de todas las partes durante los cerca de 45 minutos que ha durado su declaración como investigado. Y la Fiscalía, por su parte, había pedido que se le prohíba acercarse a menos de 500 metros de Hermoso y comunicarse con ella durante la instrucción de la causa.
Además, el Ministerio Público ha pedido al titular del Juzgado Central de Instrucción Número 1 que Rubiales deba comparecer cada quince días en la sede judicial más cercana.
Rubiales ha acudido este lunes al tribunal andando junto a su abogada, la letrada Olga Tubau –conocida por haber sido la abogada del major de los Mossos d'Esquadra Josep Lluís Trapero en el juicio del procés–, y han recorrido juntos el pasillo hasta la entrada del mismo, donde esperaban en torno a un centenar de periodistas. Sin embargo, ha rechazado contestar a las preguntas de los medios de comunicación tanto a la entrada como a la salida.
El expresidente de la RFEF ha comparecido durante una hora y ha respondido a las preguntas del juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge y de todas las partes, negando los hechos que se le imputan, tanto las coacciones como la falta de consentimiento en el beso, según las citadas fuentes.
Coacciones desde la RFEF a Jenni Hermoso
Durante el interrogatorio de este viernes a Rubiales, las acusaciones han puesto su mira en "tres o cuatro" nombres de la RFEF que habrían sido responsables de coaccionar directamente a Hermoso para que justificara públicamente el beso.
Así lo ha adelantado la Cadena Ser, que explica que el expresidente de la Federación negó en todo momento que se produjeran presiones por parte de estas personas, que formarían parte en ese momento de su círculo próximo.
Las palabras de la abogada de Jenni Hermoso
Por su parte, la abogada de Jenni Hermoso, Carla Vall, también presente en la declaración, ha pedido como la fiscalía medidas cautelares para el expresidente de la Federación Luis Rubiales, investigado por agresión sexual y coacciones a la futbolista, y ha reiterado que "fue un beso no consentido".
"Todo el mundo vio las imágenes, todo el país las vio. Y podemos decir precisamente que gracias a ello, gracias también al cambio social, al cambio legal, de algún modo podemos sostener que hubo completamente una falta de consentimiento por parte del señor Rubiales", ha manifestado en declaraciones a los periodistas congregados ante la Audiencia Nacional.
Vall, que ha agradecido la atención que está recibiendo el caso, ha señalado que Hermoso se encuentra "afectada" por lo sucedido, "por el acto humillante que sufrió en el estadio y que ha empañado un hito deportivo, una victoria tan grande".
En este contexto, ha pedido un trato adecuado "para sostener emocionalmente este proceso". En relación a este asunto, la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha afirmado que "reconforta" que la Fiscalía pida medidas cautelares contra Rubiales. "No acercarse a la ofendida, prohibir comunicarse con ella o su familia por cualquier medio. Es importante por la presunta agresión y las coacciones", ha señalado.
Rubiales llegaba a la Audiencia Nacional tres cuartos de hora antes de su citación acompañado de su abogada, Olga Tubau, conocida por haber defendido al mayor de los Mossos d´Esquadra Josep Lluís Trapero por su actuación en el 1-O y que finalmente resultó absuelto.
A la entrada de la sede del tribunal, Rubiales, sin hacer declaraciones -tampoco a la salida-, abría la puerta a la letrada ante el medio centenar de cámaras de medios nacionales y extranjeros que se han agolpado en uno de los días de mayor expectación mediática de los últimos tiempos en la Audiencia Nacional.