El Ayuntamiento de Vigo ha presentado alegaciones a la modificación del plan general de Mos para la delimitación de un sector de suelo urbanizable de usos dotacionales y terciarios en el que el Celta tiene previsto construir un centro comercial junto a su nueva Ciudad Deportiva. En el marco del trámite de consultas para la evaluación ambiental estratégica, que concluía justamente este viernes, la corporación viguesa argumenta que esta modificación puntual "no se ajusta enteramente a derecho", según detalla la edil de Urbanismo, María José Caride, en un comunicado.
Considera que esta modificación puntual, en la parte que afecta a los usos terciarios, tanto por su incidencia en el comercio de proximidad de Vigo y en las áreas comerciales previstas, como por su soporte en servicios e infraestructuras propias, "daña las finanzas" de la corporación olívica, además de ser incompatible con un "uso racional del territorio".
Alega que la medida "trasciende los límites del término municipal de Mos" y afecta a Vigo
Caride sostiene que el programa de necesidades del Celta en lo relativo a la ciudad deportiva (campos, pabellones, aparcamientos, edificios docentes y administrativos y un hotel-residencia para jugadores, entre otras) podrían realizarse en Vigo sin necesidad de modificar el planeamiento municipal. Incide en que se podría articular a través de un plan especial de dotaciones, a tenor de lo dispuesto en la Ley del Suelo de Galicia.
En cuanto a las cuestiones técnicas del servicio de urbanización e infraestructuras demandadas por el Celta, tales como abastecimiento de agua, infraestructuras viarias o transporte colectivo, la corporación viguesa indica que entrañan "serias dificultades de cumplimiento".
Caride sostiene que la modificación puntual del plan general de Mos "plantea diferencias técnico-jurídicas que deberían ser resueltas", por lo que emplaza a las partes implicadas, dado que esta actuación "trasciende los límites del término municipal de Mos" y afecta a Vigo. Finalmente, recuerda la existencia de un convenio suscrito por el Ayuntamiento de Vigo y el Celta para la utilización de instalaciones deportivas municipales que "deberá concluir" en una concesión del estadio de Balaídos.
