Nadie llorará la derrota del Teucro contra el Eivissa. El conjunto azul no está para recrearse en torneos menores. Y la Copa lo es. Una competición con escaso atractivo, de la que las escuadras de Plata pueden obtener poco oficio y beneficio y que puede acabar generando indeseadas distracciones, desgaste físico y riesgos innecesarios.
A pesar de lo que pueda parecer por el resultado, el Teucro afrontó el partido con seriedad, traducida en un notable ritmo de comienzo de la contienda. El bloque azul circulaba con fluidez en primera línea, finalizaba con facilidad y además podía correr de vez en cuando aprovechando las aperturas de un Joshua Rau inspirado.
El Eivissa no era capaz de encontrar huecos en la agresividad azul en defensa y en consecuencia, los pontevedreses huyeron hasta una ventaja de cuatro goles, 6-2, que obligó Eugenio Tilves a detener la contienda para tirar de las orejas a sus hombres.
► Lea la crónica completa en la edición impresa de DIARIO DE PONTEVEDRA de este domingo