30-32. El Naturhouse acaba con la imbatibilidad del Teucro en Pontevedra

El Naturhouse La Rioja acabó con la imbatibilidad del Teucro (30-32) como local y alargó la suya propia en la liga Asobal, en un partido que se le puso muy cuesta arriba en el primer tiempo, pero que logró voltear con un contundente parcial 0-6 en el arranque del segundo, lo que no impidió, sin embargo, que tuviese que sufrir hasta el final.

El Naturhouse se vio superado en la primera media hora por un rival que rozó la perfección. El Teucro castigó con dureza la falta de intensidad defensiva de los riojanos, a lo que se sumó la nula aportación de sus porteros, primero el sueco Richard Kappelin y después Gurutz Aguinagalde.

El central Erik Balenciaga, con sus penetraciones, y los laterales Jose Manuel Rial y Dani Hernández destrozaban una y otra vez el sistema defensivo planteado por Jota González. El Naturhouse vivía únicamente de los errores del equipo gallego. Cada pérdida de balón del Teucro se traducía en un gol visitante.

Errores que logró corregir el equipo pontevedrés, lo que le bastó para distanciarse en el marcador. El Teucro cogió mediado el primer acto una renta de cuatro goles, que llegó a ser de cinco (15-10, 16-11, 18-13), con la que jugó hasta el minuto 37 (24-20). Los locales tenían encarrilado el duelo, pero todo cambió en apenas diez minutos. El Naturhouse endureció su defensa y Kappelin, que había vuelto a pista, empezó a tocar balones. Y en ataque el dos para dos de Víctor Vigo con Javi García hizo muchísimo daño al 6-0 defensivo gallego.

En un visto y no visto, el Naturhouse se vio por delante en el marcador, después de un contundente parcial 0-6 en cinco minutos que Quique Domínguez, entrenador local, intentó cortar, sin éxito, con dos tiempos muertos prácticamente seguidos. Del 25-21 se había pasado al 25-27.

Pero este Teucro si por algo se caracteriza es por no entregarse nunca. Se sobrepuso a su mal momento y no tardó en enseñarle los dientes a su rival, incapaz de matar el partido por sus errores en ataque.

El choque entró en los últimos nueve minutos con el marcador apretado (29-30). La emoción era máxima. En siete minutos ninguno de los dos logró marcar. El Teucro porque se estrelló con un espectacular Kappelin en la recta final; el Naturhouse porque se le atragantó la defensa 5-1 local.

A falta de un minuto y medio, los pontevedreses disfrutaron de otro ataque para empatar. De nuevo apareció el portero sueco para sacar el lanzamiento de Balenciaga. Y acto seguido Malmagro y Pedro Rodríguez sentenciaron.